La pizarra: La cabeza se comprime

Empate justo entre el Valencia y el Barcelona en un partido en el que ambos mostraron sus armas. El Real Madrid y el Atlético ganan y se colocan a ocho puntos del líder.

Empate justo entre el Valencia y el Barcelona en un partido en el que ambos mostraron sus armas. El Real Madrid y el Atlético ganan y se colocan a ocho puntos del líder.

Real Madrid-Málaga

Más goles que ideas

Un juego carente de ideas y triste. Tan solo los pelotazos de Kroos daban opción al ataque. Isco, desaparecido. Carvajal pone criterio y Marcelo, destellos. Suyo fue un centro preciso para que Benzema abra el marcador. Llegó el susto malacitano (1-1); Casemiro lo arregla en otro regalo. El árbitro, protagonista, eclipsa el mal juego.

¡De penalti! (y pide la hora)

«ZZ» daría órdenes para la reacción. ¿Isco se desperezará? El ritmo se acelera, pero hoy no es la tarde. Pronto el Málaga se atreve y empata, con Casilla de cómplice. ¿Se ve ganador? Llegan los cambios para agitar a un equipo moribundo. Modric saca de la chistera un conejo salvador. Se pide la hora en un triunfo agónico para que un «CR» desaparecido se reencuentre con el gol.

Valencia-Barcelona

De orquesta a banda

Un primer acto donde la orquesta funcionó a todo meter. Sintonía de fútbol. Anticipación, presión, control y balón. Sólo el árbitro privó a los azulgrana de lo que pudo suceder. Los músicos se cansan y aparece la banda. El acoso «che» llega en forma de contra. Aparece el plan B. Leo, en una acción magistral con Alba, hace justicia.

Del miedo al sueño

Fútbol de trincheras. Cerrojo. 45 minutos donde se blindan delante de Neto esperando un milagro. En el segundo acto, los «che» se desmelenan con mucha verticalidad. Por la banda izquierda encuentran la avería. Un golazo para soñar, pero nuevamente se encogen, atrincherándose para manejar la renta. Grave error. Se hizo justicia.