Atlético de Madrid

Atlético de Madrid

Sociedad perfecta

La Razón
La RazónLa Razón

No fue el mejor partido del Atlético pero este equipo no cede y sigue enganchado a todo gracias a la conexión Koke-Torres, una de esas pequeñas sociedades que suman y hacen grandes a los equipos. Porque al habitual despliegue físico, de ayudas en las coberturas, la famosa intensidad y todo eso, hay que añadirle esas gotas de calidad individual de algunos de sus hombres clave, Griezmann aparte. Pongamos que hablo de Koke, que está enorme. El centrocampista, canterano, se ha convertido en el jugador más determinante del equipo porque aporta fútbol, circulación de balón, pases interiores, su maravillosa conexión con el Niño y ayer también, gol. Un cóctel completísimo.

El Calderón más frío

En cualquier caso, no fue fácil el triunfo ante un Granada que plantó cara pese a recibir un gol tempranero. De hecho, Rochina asustó un par de veces, en especial con un gran trallazo que se estrelló en el poste. Un aviso de que a estas alturas de la película a todos les cuesta un mundo sacar adelante los partidos... Y el ambiente ayer también fue algo más frío, como si la explosión de adrenalina de la Champions y lo que viene provocase que esta vez se mirase al partido con el rabillo del ojo, con menor... intensidad de la habitual.

Koke se sale

Dio igual. En el segundo tiempo volvió a conectar esa sociedad Koke-Torres y además ayer el «Día del niño», y lo fue por partida doble para el Vicente Calderón. Torres ha cogido racha, está con confianza, con esa fe de los delanteros que saben que en las malas no les entra nada (¡lo que tardó en llegar aquel gol 100!), pero que en las buenas todo lo que tocan lo convierten en oro. Torres hizo el segundo y ya tenemos a otro delantero centro que vuelve llamar a la puerta de la selección, tras la pulla que le lanzó a Del Bosque en «El Larguero»...