Giro de Italia

Ciclismo

El primer golpe de Nairo en el Giro

Geraint Thomas y Mikel Landa, que llegó a casi 27 minutos, perdieron sus opciones después de una tumultuosa caída en el ascenso al último puerto

Nairo Quintana celebra su triunfo en la etapa del Giro.
Nairo Quintana celebra su triunfo en la etapa del Giro.larazon

Quintana gana en el Blockhaus y se viste de rosa en el Giro. Geraint Thomas y Mikel Landa, que llegó a casi 27 minutos, perdieron sus opciones después de una tumultuosa caída en el comienzo del ascenso al último puerto

Nairo Quintana ya viste de rosa. Su ataque dejó por el camino a Nibali, que se había marchado con él y con Thibaut Pinot cuando quedaban seis kilómetros para alcanzar la cima del Blockhaus. El italiano parecía que andaba con facilidad, no se levantaba del sillín para perseguir a Nairo, pero era sólo un espejismo. Resistió un par de arrancadas más del colombiano antes de reventar. Otros ya lo habían hecho antes, como Jungels o Kruijswijk. Igual que Geraint Thomas y Mikel Landa. Los dos jefes del Sky se vieron envueltos en una caída masiva por culpa de una moto de la organización parada en el lado izquierdo de la carretera en el comienzo del ascenso.

Landa fue el primero en levantarse. Thomas tardó más, se quejaba de la muñeca. Pero mientras el galés iba recuperando posiciones poco a poco y lejos de Nairo, Mikel se fue hundiendo cada vez más. “Me he levantado rápido, pero me he dado cuenta de que no podía dar pedales. He subido con una pierna”, confesaba el vitoriano en la línea de meta. El vitoriano perdió casi 27 minutos en la línea de meta. Geraint Thomas llegó a 5:08 y Adam Yates, otro de los damnificados por la caída, llegaba a 4:39. El Giro, de repente, casi había acabado para ellos.

Mientras algunos se hundían, otros, como Dumoulin, se crecían en las cuestas del Glockhaus. No pudo responder al ataque inicial de Quintana, pero subió a su ritmo hasta alcanzar a Pinot. Llegaron juntos a 24 segundos de Nairo. Mollema también superó en el ascenso a Nibali. El holandés perdió 41 segundos en la cima. Nibali, un minuto.

Quintana había rentabilizado el trabajo de su equipo durante toda la etapa. “Ha sido un día muy bonito. He querido demostrar que mis piernas y las de todos mis compañeros van bien. Todos los muchachos han trabajado de manera fantástica y eso siempre te da una motivación extra para rendir al máximo”, explicaba el colombiano después de vestirse de rosa.

El lunes es día de descanso y la carrera regresa el martes con una contrarreloj. Su perspectiva de carrera ha cambiado ahora. Dumoulin y Pinot, que ha mejorado mucho en la especialidad, son mejores contrarrelojistas que él. “Sabía que era importante abrir algo de distancia con los rivales de cara a la crono. Después del primer ataque he visto que Pinot y Nibali me seguían, pero lo he seguido intentando una y otra vez hasta que he podido abrir y seguir hacia delante. Queda mucho por delante en este Giro, ya veremos el martes si estos 30 segundos sobre Dumoulin son muchos o pocos, pero de momento me quedo con una buena sensación y eso es lo importante por ahora”, añadía el colombiano, que tuvo un recuerdo para el fallecido Michele Scarponi. “Lamento mucho su pérdida”, dijo.