Cuestión de sexo

La coreana Park Eunsun, rival de España hoy, se ha enfrentado a dudas sobre su femineidad.

La página web de la FIFA la recuerda como una joven «enclenque» cuando, a los 16 años, debutó en un Mundial en 2003. Corea del Sur y Park Eunsun han necesitado doce años para regresar a un campeonato del mundo, pero la delantera coreana ya no es aquella joven debilucha rodeada de mujeres mayores. Su 1,84 de altura y sus 74 kilos resultan sospechosos para los rivales. Algo a lo que empieza a estar acostumbrada la delantera surcoreana, que aún no ha debutado en el Mundial.

Ya en 2010, antes de la Copa de Asia, la delegación china solicitó que se le hiciera un análisis de sexo. Park no fue convocada para el torneo y no tuvo que someterse a ese análisis. «He pasado los exámenes de sexo varias veces en una Copa del Mundo, en unos Juegos Olímpicos y en otros torneos y no hubo problemas», se defendió la jugadora. «Es humillante», añadía.

La polémica se repitió en 2013 en la Liga de su país. Park jugaba en el Seúl City y los entrenadores de los seis equipos que completaban el campeonato solicitaron un control de sexo para la goleadora del torneo. Su superioridad física la convirtió en sospechosa en su propio país, a pesar de que llevaba ya diez años defendiendo a su selección en compromisos internacionales. La Federación coreana explicó que Park Eunsun ya se había sometido a ese control con 15 años y no resultaba necesario. El resultado no iba a ser diferente para los análisis por muchas veces que se repitieran. «Tratar de comprobar el género de una persona es una grave violación de los derechos humanos», decía su club para defenderla de lo que consideraba una agresión.

Park no es la única deportista que ha tenido que convivir con la sospecha sobre su sexo. Algo parecido le ha sucedido a la atleta surafricana Caster Semenya, que ganó el oro en los 800 metros del Mundial de Berlín en 2009 y después estuvo varios meses sin poder competir a la espera de un examen de sexo cuyos resultados nunca llegaban. Los análisis determinaron que, en lugar de útero, Semenya tiene testículos internos, algo que no la inhabilita para competir como mujer. Superada la crisis, la surafricana ganó la plata en el Mundial de Daegu en el año 2011.

Más motivos para sospechar tenían las rivales de Stella Walsh, nacida Stanislava Walasiewicz, que en 1932 ganó el oro olímpico y se convirtió en la primera mujer que bajaba de los 12 segundos en los 100 metros. También fue la primera en bajar de los 24 segundos en los 200. En 1980 murió de un disparo durante un atraco en una tienda de Cleveland y en la autopsia se comprobó que tenía genitales masculinos.

El Comité Olímpico Internacional consideró obligatorio el examen de sexo entre 1967 y 1999. Después, lo descartó por humillante. La IAAF (Federación Internacional de Atletismo) lo sustituyó por un análisis visual en el que el vello corporal es el principal indicio de masculinidad.

Desde la temporada pasada, Park ha conseguido vivir lejos de las sospechas. Juega en el Rossiyanka de la liga rusa, donde su físico ya no resulta tan significativo. Ha aprendido a enfrentarse a jugadoras de su tamaño, asegura. Ya no resulta tan llamativa.

La delantera coreana ya se enfrentó a España en 2004, en el Mundial sub’20 que se disputó en Tailandia. Ganó España (2-1) y Park consiguió el único tanto de su selección. Aquél fue el único partido que ganó la Selección española en un torneo para olvidar. Terminó última de grupo, empatada a puntos con Corea, y las dos selecciones se quedaron fuera de la segunda fase. En aquel equipo español jugaban algunas de las internacionales que ahora volverán a tener a Park enfrente. Ruth García, Natalia Pablos y Vero Boquete, que fue reconocida por la FIFA como una de las jugadoras con más futuro, vivieron allí su primera experiencia en una Copa del Mundo.

Para Park, que ya había disputado el Mundial absoluto en 2003, era la segunda. En el torneo de las mayores tampoco había tenido mucha suerte. Corea del Sur no pasó de la primera fase, después de ser última en el grupo que compartía con Brasil, Noruega y Francia. Park Eunsun jugó completos los dos primeros encuentros contra Brasil y Francia y fue sustituida en el minuto 60 del último, contra Noruega, en el que su selección cayó goleada (1-7).

Park, que jugaba con el 7, no pudo marcar ningún gol. Su situación en el equipo ha cambiado. Llegaba como estrella después de ser la máxima goleadora de la fase de clasificación para el Mundial con seis tantos. Ha marcado en total 18 en los 33 encuentros que ha disputado con la selección. Sin embargo, aún no se ha estrenado en un campeonato al que llegaba con mucha ilusión. «Puede que antes del primer partido esté un poco nerviosa. Pero me gusta afrontar los encuentros con confianza en nuestras posibilidades, y me divierte jugar. Participamos ahora por segunda vez en la Copa Mundial, y me gustaría que consiguiésemos llegar más lejos. Ése es el objetivo», aseguraba antes de comenzar el campeonato.

Park Eunsun ha perdido su puesto en el Mundial. Corea juega con una única delantera, Ji Soyun, que pertenece al Chelsea y ha sido elegida futbolista del año esta temporada en Inglaterra.