El «nuevo bribón» de Don Juan Carlos

La imagen con las que nos sorprendió Don Juan Carlos hace unas semanas en aguas de Sangenjo, compitiendo en una regata a bordo de una embarcación del año 1929, no quedará en sorprendente anécdota. El padre de Felipe VI, después de pasar trece veces por quirófano –las dos últimas a finales de 2013 a causa de la cadera–, se encuentra en un gran momento de salud física y mental y volverá a competir. Según afirman personas cercanas al Rey Emérito, regatear de nuevo le ha devuelto la ilusión a Don Juan Carlos, después de estos últimos años de sentirse mal y en continuos procesos de recuperación.

wyUNA NAVE de campeones

Fue precisamente en Sangenjo, rodeado de sus íntimos amigos, el armador Josep Cusí y el presidente del Club Náutico de la región de Pontevedra, Pedro Campos, donde se tomó la decisión de adquirir una «réplica» del barco en el que habían navegado: el «Acacia». Nave que ha dado muy buenos resultados en esta séptima edición de la regata Rey Juan Carlos I El Corte Inglés Máster, ya que el padre del Jefe de Estado y el resto de la tripulación salieron triunfadores –a bordo de esta embarcación, el vasco Juan Manuel Alonso Allende se convirtió en el primer campeón español, y también en él navegó el medallista de vela Santiago Amat–. Campos y Cusí decidieron comprar en Finlandia a su «hermano», el «IAN», que en estos momentos se encuentra viajando desde el país europeo. El trío naviero se desplazó en un avión privado para probar allí la nueva adquisición que ha corrido a cargo de los compañeros de Don Juan Carlos, y que, según dice Zarzuela, bajo ningún concepto debe entenderse como un obsequio para el padre de Felipe VI, sino que es para el disfrute de toda la tripulación. El desembolso ha sido de 65.000 euros. Sorpresa será cómo se llame el nuevo buque, ya que se le «bautizará» otra vez, aunque aún no se ha despejado la incógnita. Lo que es seguro es que no llevará nombre de mujer. De 11,35 metros de eslora y 1,90 de manga, esta antigua embarcación ha sido restaurada con maderas nobles, y es la más adecuada para Don Juan Carlos, ya que su estructura interior le permite ir sentado y no tener que hacer movimientos, según explica Campos en conversación con este periódico. Él dirige el timón. «Está con una ilusión enorme, disfrutando muchísimo con este nuevo proyecto», asegura. «Y, lo más importante, con un espíritu extraordinario».

En cuanto llegue a España el barco, inmediatamente lo sacarán a navegar junto con el «Acacia» para comprobar cómo responde y analizar las mejoras que se necesite hacer. Es decir, tenerlo todo a punto para cuando empiece de nuevo la competición de regatas. Eso sí, de embarcaciones antiguas como la adquirida.

Don Juan Carlos, a sus 77 años, lleva desde 2011 oficialmente «retirado» de la vida deportiva. La última vez que se le pudo ver a bordo del mítico «Bribón» fue en la Copa del Rey de 2009 en Palma de Mallorca. El pasado mes de junio dio sus primeros pasos tras las últimas intervenciones quirúrgicas en la prueba costera de la Volvo Ocean Race en aguas de Gotemburgo, Suecia, a bordo del velero español «Mapfre».

Como ya informó LA RAZÓN, la evolución física del Rey Emérito ha sido muy positiva. Se lo ha tomado bastante en serio y ha cumplido disciplinadamente con su plan de rehabilitación –que consistía principalmente en ejercicios de piscina y de bicicleta–, al principio por la mañana y por la tarde y, a causa de su mejora, únicamente por la mañana hasta sólo necesitar ejercicios de mantenimiento. Ahora, a prepararse para seguir compitiendo.