Enemigos por un día

Valverde vuelve a San Mamés y se reencuentra con Ziganda, con quien compartió delantera en el Athletic a principios de los 90. «Eran el complemento perfecto», recuerda Alkorta.

«No es la primera vez que juego contra el Athletic. No es nuevo. Es un partido de fútbol, lo emotivo hay que dejarlo a un lado», explicaba ayer Ernesto Valverde. En concreto ha jugado cuatro partidos de Liga contra el club de su vida en San Mamés y todos los ha perdido. Tampoco es la primera vez que se va a enfrentar a un amigo que le ha acompañado durante gran parte de su carrera. Entre 1991 y 1996, una época en la que las rotaciones no se llevaban y donde las alineaciones titulares se sabían de memoria, la del Athletic finalizaba con «Txingurri» Valverde y «Cuco» Ziganda. «Siempre se han llevado bien. Tenían una gran sintonía fuera del campo», recuerda Alkorta, que compartió vestuario con ellos. «Eran el complemento perfecto. “Cuco” era esfuerzo y corazón y Ernesto, el saber moverse entre líneas, el entender muy bien el juego», los define el ex central. «Los dos tenían mucha personalidad y peso en el grupo. Eran personas que siempre ayudaban al de al lado», prosigue. «Eran buenos, rápidos, con olfato», recuerda Irureta, que los dirigió una temporada casi completa. «A Valverde ya lo tuve en el Sestao, era un extremo veloz. Ziganda era fuerte y no se amedrentaba nunca», continúa el técnico que ahora, a los 69 años, se dedica «a vivir y a la familia». «Nos compaginábamos muy bien», admite Valverde. «Como jugadores y después, hemos conectado en muchas cosas. La relación ha sido más personal que deportiva. Le tengo mucho aprecio», admite «Cuco».

En la época en la que estuvieron juntos sobre el césped marcaron 96 goles: 66 Ziganda y 30 Valverde. «“Cuco” le marcó uno al Newcastle de Kevin Keegan en la UEFA que nos clasificó y es de los más recordados en el viejo San Mamés», dice Irureta. Al ahora entrenador del Athletic todavía lo paran por la calle para darle las gracias por aquel tanto.

Después de su etapa como futbolistas, también coincidieron como técnicos (2013-17): Valverde dirigía al Athletic y Ziganda era el preparador del filial. «A los que quieren ser entrenadores se los ve venir. Algunos vamos, entrenamos y jugamos; otros tienen más curiosidad, preguntan detalles en el entrenamiento, cosas del rival...», asegura Alkorta. Hoy cada uno mirará para su equipo. Son rivales por un día. «Cada uno irá a lo suyo: Valverde, a seguir bien en el Barça; y Cuco, a respirar un poco», piensa Alkorta. Porque Ziganda no ha comenzado bien como primer técnico del Athletic y tiene que aguantar las comparaciones con quien hoy será su oponente. «No me molestan las comparaciones con Valverde. Me parece que es de justicia reconocer sus años aquí», revela «Cuco». Irureta cuenta cómo es tener que enfrentarte a un amigo. «En fútbol pasa a menudo. Yo tuve muchas veces como rival a Luis [Aragonés]. Quizá puedas saber algún detalle más, algo que le pueda desequilibrar...».