Año I después de Casillas

No queda nada para que ruede el balón. El Barça defiende título en su duelo eterno con el Real Madrid, que pide revancha. Cristiano ansía el trono de Messi con permiso de otros tres equipos «Champions» en la mejor Liga del mundo. Y la primera, tras 16 años, sin Casillas. Iker salió del Madrid tras un año insostenible en el que perdió la alegría de jugar. Hacía tiempo que se sentía incomprendido por gran parte de la afición y hasta mandó a paseo al Bernabéu, que le discutía cada acción y del que se despidió con cierta frialdad. Como la que tuvo su adiós oficial. Se nos hará extraño ver al Madrid sin su poderosa figura. Y también pasar página a ese permanente debate –a la espera de lo que pueda pasar con De Gea– de la portería.

- La hora de Ramos

El brazalete lo recogerá Sergio Ramos. Siempre ha demostrado personalidad y coraje para levantar al equipo en situaciones adversas. Pero, después de un verano movido con su mejora de contrato, será uno de los más observados. En su undécima temporada en el Madrid, debe ser un espejo en el que mirarse para el vestuario. Es un tío con alma y afronta una gran responsabilidad. Más que nunca.

- Cristiano, a por todas

Cristiano vuelve a la batalla. Se le ve relajado, desenfadado y cómplice con los medios, como mostró a las cámaras de LaSexta tras el Trofeo Bernabéu. Tras un año para olvidar, en el que marcó muchos goles sin un fútbol espectacular, quiere regresar más fuerte que nunca. Sabe que ha perdido el Balón de Oro, pero piensa en el siguiente. En disputarle el trono a Messi. En volver a ser campeón y levantar trofeos con el Madrid. Ésta es la temporada en la que superará a Raúl y se convertirá en el máximo goleador de la historia del club. Y quiere ser el gran protagonista. Para ello, tiene que adaptarse al nuevo esquema de Benítez, entenderse con Bale y recuperar la felicidad. Debe volver a sonreír.

- Retos de Messi y Luis Enrique

El Barça viene de ganarlo todo. Con un tridente demoledor arriba, llegó crecido a la Supercopa de España, pero sufrió un duro varapalo. Puede que le sirva para asumir que no se gana a medio gas. Luis Enrique tiene trabajo: evitar que el equipo se acomode para volver a conquistarlo todo... y corregir la «Messidependencia». Leo será fundamental. Tendrá que dar siempre el máximo. Se le va a exigir el mismo nivel que la temporada pasada, cuando decidió todas las competiciones.

- Ojo al Atlético

Sin nuevos galácticos en los dos grandes rivales –de momento–, el Atlético es el equipo que mejor ficha y mejor vende. Nos ha traído a la Liga a Jackson, que puede ser una de las sensaciones, entre otros refuerzos como Vietto o la vuelta de Óliver. Se le ha visto en pretemporada la tensión con la que acabó la pasada. Muerde desde el primer día. El profe Ortega marca el ritmo desde el minuto uno y los nuevos apenas pueden aguantar la presión de los entrenos. Pero así es el plan de Simeone. Dijo que el torneo está «peligrosamente preparado» para el Madrid, pero lo va a pelear con todo lo que tiene.

- Sentimiento ché

Tras una Liga fantástica, el Valencia quiere repetir. Pero debe antes asegurarse la «Champions». Es fundamental. Gayá, vigilado por el Madrid, tiene que confirmar su papel en un equipo que necesita sobreponerse a la marcha de Otamendi y a la salida de Amadeo Salvo, un referente. Que Peter Lim no olvide que el Valencia es un gran sentimiento. Mestalla lo muestra en cada partido.

- El Sevilla, a examen

Y El Sevilla. Tras una enorme temporada y una gran Supercopa de Europa, debe afrontar las dos competiciones más exigentes y la Copa. No tiene potencial para competir con Madrid o Barça, pero ha demostrado su capacidad y quiere fajarse de la mano de Vitolo y fichajes como Konoplyanka. Habrá que ver si la «Champions» pasa factura a los de Emery.

- Suerte a todos

Todos los aficionados al fútbol estamos de enhorabuena. Esto está punto de empezar. Bienvenidos a los nuevos. Ánimo a la gente de Elche, descendido en los despachos. Volveréis muy pronto. Y mucha suerte a todos. Que nos sigamos divirtiendo.

@JPEDREROL