Benzema impone su jerarquía

En el minuto veinte, Casillas corrió para evitar un saque de esquina. Es una jugada habitual en muchos porteros, pero en este Madrid sonaba ayer a desesperada, a cuestión de vida o muerte. Un córner empieza a ser peor que un penalti. Porque cada lanzamiento que cede el equipo de Ancelotti produce un escalofrío en los aficionados, que se temen lo peor. Lo más fácil es señalar a Casillas, que siempre sale retratado en el mismo sitio. Es el lugar del portero, pero ahí no evita nada, aunque sus defensas tampoco. En el minuto 20 Casillas no pudo evitar el saque de esquina, pero en la jugada posterior del Ludogorets salió ileso el equipo de los dragones. Ya había recibido un gol en uno anterior, cuando tocó un rival en el primer palo y remató otro en el segundo, como si no hubiese futbolistas del Madrid defendiendo.

Hasta en el partido más sencillo de la «Champions» se encontró el equipo de Ancelotti con un tanto de una jugada a balón parado. En los entrenamientos se preparan, pero hay una falta de concentración que debería preocupar, porque pasan los partidos y continúan los dramas cada vez que el rival se acerca a la esquina.

Fue un susto, un susto largo, un susto preocupante, pero no pasó de ahí porque el Madrid con el paso de los minutos consiguió vencer su pereza y ganar los tres puntos, siempre desde la incomodidad. El equipo lleva seis y va a pasar de ronda, pero ayer dio la impresión de que no le apetecía nada. Empezó sin prisas y después le costó sentirse superior al equipo local. Tanto que hasta que no salió Benzema no remontó el encuentro y nunca estuvo seguro de cerrarlo. El Madrid no se siente cómodo en los saques de esquina y tampoco cuando Marcelo sube y se le olvida bajar. El brasileño dio el pase al francés para marcar el segundo, pero por su lado llegó el rival con facilidad. Le falta alcanzar su mejor estado físico.

Tampoco le ayudó ayer Ramos, al que le cuesta concentrarse los días que no son tan importantes. El central quiso repartir juego desde atrás, pero estuvo muy impreciso. Un partido para borrar de un central imprescindible.

Fue Isco quien lo despertó, Ronaldo quien metió al equipo en el partido y Benzema el que lo decidió. Después de tantas críticas, el delantero francés sólo ha necesitado dos encuentros para demostrar que es imprescindible. O como pasador, como sucedió el día del Villarreal. O como delantero, como ocurrió ayer: dentro del área, mandó a gol un pase desde la banda izquierda. Lo que hacen los delanteros de toda la vida. Chicharito, que fue titular, le puso entusiasmo, pedía consejo para saber su posición ante la movilidad de sus compañeros y dejó dos remates: uno de cabeza, flojo, pero bien dirigido y otro con el pie, tirándose al suelo, sin portero, que mandó al córner. A Benzema no se lo perdonarían.

Antes había sido Isco quien sacó al Madrid de su modorra. Todo el juego se volcó en su lado. Era él quien llevaba el balón al área, en busca de los desmarques de Ronaldo. Por el otro lado, Modric pasaba sin dar muchas noticias y Bale no terminaba de desatarse. En la segunda parte se le vio algo más, pero le cuesta ser el futbolista con el que siempre se puede contar para hacer daño en la portería contraria.

Fue Ronaldo quien acabó con la esperanza de un voluntarioso Ludogorets. Aunque falló un penalti, marcó el segundo que él mismo se inventó. El árbitro no dudó y el portugués acabó con el susto al tirarlo al mismo lado, pero más colocado y más raso. Su gol cambió la dinámica del Madrid, al que nada le salía bien antes.

Dio algo de tranquilidad a un equipo que no atacó con claridad y defendió regular. No tenía el día bueno. Tuvo que entrar Benzema para dejar Sofía sin más daño que el recuerdo de una noche poco agradable.

Ficha técnica:

1 - Ludogorest: Stoyanov; Caiçara, Aleksendrov (Misidjan, m.82), Moti, Minev, Dani Abalo, Dyakov, Fabio Espinho (Anicet Abel, m.82), Hernández, Marcelinho (Wanderson, m.70) y Bezjak.

2 - Real Madrid: Iker Casillas; Arbeloa, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Illarramendi, Modric (Kroos, m.73), Isco (James, m.76); Bale, Cristiano Ronaldo y ‘Chicharito’ (Benzema, m.67).

Goles: 1-0, m.6: Marcelinho. 1-1, m.25: Cristiano Ronaldo de penalti. 1-2, m.77: Benzema

Árbitro: Craig Thomson (ESC). Amonestó a Minev (10), Dyakov (24), Abalo (57), Espinho (62) por el Ludogorest; y a Ramos (72) por el Real Madrid.

Incidencias: encuentro correspondiente a la segunda jornada de Liga de Campeones, disputado en el Nacional “Vasil Levski” de Sofía.