El peor día para tropezar

El Levante bajó al Atlético de su nube. Ganó el partido por su entrega, su intensidad y su buena predisposición defensiva y deja a los de Simeone en el alambre de tener que jugarse la Liga en el Camp Nou dentro de dos semanas.

El Levante bajó al Atlético de su nube. Ganó el partido por su entrega, su intensidad y su buena predisposición defensiva y deja a los de Simeone en el alambre de tener que jugarse la Liga en el Camp Nou dentro de dos semanas. El gol en propia puerta de Filipe Luis (min 7) fue un mazazo del que el conjunto rojiblanco ya no se recuperó, pese a que en la segunda parte tuvo ocasiones, remató al poste y se topó con Keylor Navas, otro de los porteros de moda de nuestro fútbol.

«Juega cada partido como si fuera el último», ponía en las camisetas de los jugadores a su regreso de Londres. Sin embargo, el mensaje no se ajustó a la realidad porque el Atlético salió despistado, sin excesiva tensión y en el primer córner que tuvo en contra Filipe Luis marcó en su portería. Sacó Diop de esquina y el balón pegó en el pecho del brasileño y despistó a Courtois.

Encajar un gol ante un equipo de Caparrós suele ser un problema. El técnico sevillano apostó por la fortaleza con Diop, Simao y Sissoko, tres auténticos «bichos» en el aspecto físico, y el Atlético se pasó el primer tiempo sin saber cómo hincarle el diente al partido. Había repetido Simeone el once de Mestalla –con el cambio obligado del sancionado Juanfran–, pero las cosas no salieron igual. Se abusaba del pelotazo, las subidas de Alderweireld por la derecha fueron con cuentagotas –el belga se marcó un gran disparo (min 36) que desvió Navas, pero en general el Levante imponía su estilo, su forma de jugar y sacaba ventaja en las segundas jugadas y en el cuerpo a cuerpo. Villa no daba señales de vida; Diego Costa tenía un hueso con David Navarro y Raúl García no aparecía. Tampoco había muchas luces en Koke, Gabi y Tiago, por lo que el primer tiempo fue azulgrana. No es la primera vez que el Atlético se marca un partido deslavazado y sin orden.

De ahí que Simeone mandase a Adrián y Arda al campo. Se quedaron en el vestuario Raúl García y Villa, y la fisonomía del partido cambió. El técnico era consciente de lo que se jugaban, los jugadores también y a base de tocar más, tener serenidad y desborde con Adrián llegaron las ocasiones. El empate parecía cercano, Adrián, Diego Costa y Arda ponían en apuros al seguro Navas. Entró Diego Ribas para buscar paredes y disparos lejanos. Era una lucha contra el reloj ante un Levante que se defendía muy bien, aunque ya no era tan expeditivo y tampoco salía al contragolpe.

Un remate de Filipe que pega en Vyntra, una falta de Diego Ribas a la que no llega Diego Costa y y un tiro de Arda que obliga a Navas a meter una mano prodigiosa eran síntomas de que el Atlético quería ganar. Sin embargo, el Levante apareció para sentenciar en una buena acción de Casadesús, al que le permitieron avanzar y centrar para que Barral ganase la partida a Godín y marcase. Una losa para el Atlético, convencido de que no era su tarde, lo que se comprobó con un remate de Adrián al poste. Un cabezazo alto del asturiano y un inocente remate de Tiago a las manos de Navas fueron los últimos coletazos de un partido en el que los rojiblancos regalaron media parte.

Había media Liga en juego y para el Atlético fue el peor día para tropezar. Su cuarta derrota en el campeonato le puede complicar, y mucho, el ansiado título, que algunos ya daban por conquistado. Tuvo que tirar Simeone de psicología para mandar un mensaje positivo, para que los ocho mil que estuvieron en Valencia no pierdan la esperanza.

Ficha técnica

2 - Levante: Keylor Navas, Pedro López, Vyntra, David Navarro, Juanfran, Simao, Diop, Sissoko (Ivanschitz, m.59), Rubén (Sergio, m.70), Víctor Casadesús y Barral (Ángel, m.80).

0 - Atlético de Madrid: Courtois, Alderweireld, Miranda, Godín, Filipe Luis, Tiago, Gabi, Koke (Diego, m.62), Raúl García (Arda Turan, m.46), Diego Costa y Villa (Adrián, m.46).

Goles: 1-0, m.7: Filipe Luis, en propia meta. 2-0, m.68: Barral.

Árbitro: González González (colegio castellano-leonés). Amonestó por el Levante a Barral y Simao y por el Atlético de Madrid a Tiago y Godín.

Incidencias: partido jugado en el estadio Ciutat de València ante 22.200 asistentes. El equipo Levante-Dominicos-Maristas de fútbol-sala fue homenajeado antes del partido por su ascenso a División de Honor.