El «título» que pedía Xavi

Muchos de los que llenaron el Camp Nou no sabían lo que se siente en una noche mágica, en una gran remontada. Sus padres o abuelos les habían contado que una noche «Pichi» Alonso le marcó tres goles al Göteborg o que el «Dream Team» cuajó su mejor exhibición ante el Dinamo de Kiev cuando estaba contra las cuerdas. Pero la nueva generación de «culés», la que ha nacido con el mejor Barça de la historia, no sabía lo que era remontar. Hasta ayer. Con la derrota en San Siro fresca, Xavi anunció que a este extraordinario equipo le faltaba una gran remontada, un «título» que ya está en el museo.

Un enorme mosaico recibió a los jugadores cuando saltaron al terreno de juego. «Som un equip» –«Somos un equipo»–, se podía leer en el lateral del Camp Nou. Messi, que las ha visto de todos los colores, lo contempló maravillado mientras salía el último y comentaba la escena con una niña que había dispuesto la UEFA como su acompañante. Ni corta ni perezosa, la niña respondía animadamente a las impresiones del mejor jugador del mundo.

La afición azulgrana demostró ayer que ha madurado y ha dado un paso adelante. Aunque algunos siguen sin emplear sus cinco sentidos en animar y siempre tienen un halo de energía preparado para reivindicaciones políticas que no vienen a cuento en noches tan futboleras como la de ayer.