Luis Suárez mata al mejor Madrid

El equipo de Ancelotti fue superior al Barcelona casi una hora y empató el gol que había marcado Mathieu, pero después el tanto del uruguayo fue demasiado para un rival muy cansado.

No ganó el Madrid y se marcha a cuatro puntos en la Liga, pero cambia su punto de vista de lo que queda de temporada. Llegaba al Camp Nou como quien va a un matadero, sin saber muy bien qué imagen iba a dar y resultó que durante 55 minutos, hasta que Luis Suárez hizo el segundo del Barcelona, los de Ancelotti jugaron sin complejos, con el balón, con Benzema como faro y guía de todos, con Marcelo superlativo y el resto del equipo solidario, muy junto, sin perder la posición y queriendo la pelota. El Madrid venía de las dudas, del duro invierno donde ha sufrido bajas de futbolistas y una depresión de juego y, aunque sale del choque tres puntos más lejos, gana la convicción de que está en el camino correcto para hacer un final de curso ambicioso. Le espera una montaña, pero sabe que puede contar con el gol de Ronaldo, con un Bale que guarda la posición y con que el oxígeno de Modric le va a llegar para más de sesenta minutos. El croata, que no había jugado un partido entero desde que se lesionó, acabó muerto y con su apagón se fue apagando el Madrid y entonces fue cuando pudo disfrutar el Barcelona.

Se preveía que iba a ser el equipo de Luis Enrique quien tuviese el balón y el Madrid el que esperase replegado. Pero eso ocurrió sólo los primeros minutos. Después fueron los visitantes quienes se hicieron con la pelota y comenzaron a coleccionar ocasiones. Llegaba el Madrid con facilidad porque Benzema hizo una primera parte espléndida, coronada con un taconazo para que Ronaldo marcase. El francés hizo todo bien, con una frialdad tremenda en un partido donde tanto había en juego. Lideró el ataque de su equipo con sutileza y precisión. Enfrente Piqué luchó contra todo para evitar que el Madrid remontase antes del descanso.

El conjunto de Luis Enrique marcó en un saque de falta que Mathieu remató como si a algún jugador del Real Madrid se le hubiese olvidado que había que marcarle. El equipo local buscaba a Messi, muy echado a la derecha, para empezar a jugar, pero el argentino sólo despertó en la segunda mitad, cuando Marcelo iba con la lengua fuera y su equipo tenía la oportunidad de correr. Tantos años de pelea entre Mourinho y Guardiola, tanta tensión vivida durante esos años, para que al final, en el partido de ayer (y con matices) los dos equipos se transformaran, acercándose a lo que pregonaban entrenadores antagónicos a cada conjunto.

El Barcelona llegó al descanso con la convicción de que se había salvado, de que quizá había pasado lo peor. En realidad tardó diez minutos más en pasar la tormenta. Hasta el 55, cuando, en un pase largo, Alves vio el movimiento de Luis Suárez entre los centrales del Madrid y su remate no encontró la oposición de Casillas, que se dejó caer hacia el lado contrario. El uruguayo es un delantero de alto nivel, que casi siempre elige bien. Un destello dio vida al Barcelona y el Madrid, de repente, sintió un cansancio infinito, la impotencia que ni había presentido antes.

A partir de ahí, el choque cambió de dueño de manera definitiva, Messi se liberó y Neymar empezó a regatear a los rivales, a veces a los compañeros y también a sí mismo. El brasileño, que se pelea con quien hace falta, estuvo demasiado individualista para las necesidades del equipo. El Madrid estaba roto y Luis Enrique iba dando paso a los centrocampistas para, por primera vez, ganar el partido con el dominio de la pelota. Al Madrid ya no le salía nada. Marcelo no llegaba con tanta felicidad como antes y a Benzema se le habían acabado los plomos, como al resto de sus compañeros. Ancelotti dio paso a Varane para aliviar la carga de tarjetas de su defensa, a la que Mateu cargó con amarillas discutibles y después a Jesé para dar descanso a Isco y refrescar al equipo. Pero el canterano está en proceso de recuperación, aún lejos de lo que fue.

Casillas evitó un par de goles y el rival buscó el empate con saques de esquina. El resultado no cambió. Gana el Barça y perdió el Madrid. Pero no pierde tanto.

- Ficha técnica:

2. Barcelona: Bravo; Alves, Piqué, Mathieu, Alba; Maschearno, Rakitic (Sergio, min.74), Iniesta (Xavi, min.80); Messi, Suárez y Neymar Jr (Rafinha, min.85).

1. Real Madrid: Casillas; Carvajal, Pepe (Varane, min.72), Sergio Ramos, Marcelo; Kroos, Isco (Jesé, min.80), Modric (Lucas Silva, min.88); Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema.

Goles: 1-0, min.19: Mathieu. 1-1, min.31: Cristiano. 2-1, min.56: Suárez.

Árbitro: Mateu Lahoz (comité valenciano). Mostró cartulina amarilla a Pepe (min.21), Suárez (min.28), Alba (min.37), Cristiano (min.37), Carvajal (min.48), Modric (min.52), Mascherano (min.61), Sergio Ramos (min.63), Iniesta (min.64) y Alves (min.70).

Incidencias: partido correspondiente a la vigésimo octavahk jornada de la Liga, dispuesta en el Camp Nou ante 98,760 aficionados, que llenaron el recinto. Antes del partido, el estadio expuso un gigantesco mosaico para animar a los azulgrana.