Mundial 2018: 2-0. Lo que predijo Tite...

El seleccionador de Brasil afirmó que Neymar necesitaba cinco partidos para estar en forma. Al cuarto, el delantero del PSG fue el protagonista del triunfo ante México en los octavos de final.

Neymar contribuyó a que la maldición de México continuara: por séptimo Mundial consecutivo, los octavos de final fueron su límite. Y el delantero brasileño puso una sonrisa de medio lado, porque había sido el centro de las críticas de los mexicanos en la previa. Le acusaban de piscinero y él respondió con su mejor y más decisiva actuación en la Copa del Mundo de Rusia. «Los mexicanos habían hablado de más y para eso que se vayan a su casa», opinó «Ney» cuando le entregaron el trofeo a mejor futbolista del encuentro. Pero la obsesión mexicana continuó: «Es una vergüenza para el fútbol que se pierda tanto tiempo en un solo jugador». «En una jugada demoró 4 minutos». «El fútbol tiene que ser un juego con virilidad, de hombres, y no con tanta payasada. Tanta interrupción disminuyó la actitud de quien tenía la iniciativa del juego», fueron algunas de las frases, sin aludir a «Ney» de forma directa, pero refiriéndose a él, del seleccionador mexicano, Osorio, que no dudó en decir que el árbitro «favoreció a Brasil».

Pero polémicas y rencillas aparte (también fueron llevadas al campo, con un pisotón alevoso de Layún al tobillo del «10» de la «canarinha», que, por su parte, exageró), el encuentro despertó lo mejor de Neymar. El atacante incluso se adelantó un poco a lo que había predicho su entrenador. La estrella de Brasil llegó al Mundial tras recuperarse de una lesión. «Necesita cinco partidos para estar en forma», adelantó Tite. Al cuarto, resolvió, y la Prensa de su país ya empieza a decir que ha conseguido lo que no lograron ni Messi ni Cristiano con sus selecciones. El duelo fue un quiero y no puedo de México contra un quiero y puedo porque tengo a «Ney» de Brasil. Atacó el equipo de Osorio con la verticalidad de Vela y Lozano, pero las ideas se nublaban cerca de la portería rival. Buscó el gol Brasil con su poderoso trío atacante, pero se estrellaba en Ochoa, el portero de los Mundiales, siempre destacado en la gran cita, aunque luego más irregular en el día a día de los clubes; hasta que apareció Neymar. Un eslalon por el borde del área del futbolista del PSG atrajo a un oponente tras otro. Dejó la pelota de tacón a Willian, para que arrancara, avanzara y buscara a su compañero, que había ido al otro lado, al espacio, para rematar. Neymar y Willian fueron demoledores. Fueron los brasileños que más balones tocaron, 73 el primero y 70 el segundo, lo que define al equipo de Tite. El centro del campo no es un lugar de creación. La intención es ser ahí sólidos y con músculo, y llevar el balón a los delanteros para que resuelvan con su calidad.

Neymar volvió a mostrar que anda sobrado de ella con un recurso, un tiro raso con la puntera que Ochoa sólo pudo desviar, para que Firmino marcara el 2-0. «Estoy contento de mi actuación, pero todavía más de la victoria del equipo», dijo «Ney».

2- Brasil: Allison; Fagner, Miranda, Thiago Silva, Filipe Luis; Casemiro; Willian, Paulinho (Fernandinho, min 80), Coutinho (Firmino, min 86); Gabriel Jesús y Neymar.
Seleccionador: Tite.
0- México: Ochoa; Edson Álvarez (Dos Santos, min 55), Ayala, Salcedo, Gallardo; Márquez (Layún, min 46); Guardado, Herrera; Vela, Lozano; y «Chicharito» Hernández (Jiménez, min 60).

Seleccionador: Juan Carlos Osorio.

Goles: 1-0 (min 51): Neymar. 2-0 (min 88): Firmino.

Árbitro: Gianluca Rocchi (Italia). Amonestó a Edson Álvarez, Herrera, Filipe Luis, Casemiro, Salcedo, Guardado.

Incidencias: Samara Arena. Partido de octavos de final del Mundial de Rusia.