Bale se asienta por el centro: otro partidazo

El atacante británico Gareth Bale, que tiene a la selección de Gales al borde de clasificarse para la primera Eurocopa de su historia, está jugando a su mejor nivel también en el Madrid. Muy criticado tras el 0-0 de Gijón en la primera jornada, pese a que fue de los mejores jugadores de su equipo por su constante movilidad, abrió el marcador frente al Betis, logrando un doblete, y fue fundamental en la goleada del Madrid en Cornellá pese a no marcar. Gareth participó decisivamente en cuatro de los seis goles del equipo madridista, con dos asistencias, un penalti provocado y un fantástico pase entre líneas a Cristiano que sirvió al portugués para que le regalara el tanto a Benzema. En general, el de Cardiff fue un dolor de muelas durante todo el encuentro para la zaga perica jugando en su nueva posición de mediapunta por el centro, con la libertad de movimientos que le ha concedido Benítez y que empieza a dar sus frutos.

Casemiro convence a todo el mundo

El brasileño ha venido a tapar una carencia muy importante que tenía el centro del campo del Real Madrid, donde Kroos y Modric estuvieron sobreexplotados la pasada temporada. El mediocentro, tras un Master intensivo en Oporto donde completó una fantástica campaña y se terminó de hacer como jugador, ha vuelto maduro y preparado para la exigencia de un equipo como el Real Madrid. Como ya dijo Josep Pedrerol en «Jugones de la Sexta» unos días antes de que ampliara su contrato con el club blanco, va a ser una pieza muy importante para Benítez porque aportará el equilibrio necesario en el centro del campo y permitirá oxigenar al alemán (como ocurrió el sábado en Cornellá) y al croata. Casemiro, muy del agrado y del perfil del técnico madrileño, aportará, además de equilibrio, criterio a la hora de incorporarse, una gran despliegue físico y el carácter que salvó al Madrid en Dortmund el año de la Décima.

Meterle un gol a Keylor es misión imposible

Lejos de venirse abajo por haber estado muy cerca de salir del Madrid rumbo a Manchester en el cierre de mercado, el portero costarricense está mejor que nunca. Si ya puso el Santiago Bernabéu a sus pies cuando el fantasma De Gea sobrevolaba aún la portería, con una intervención milagrosa ante Rubén Castro y un penalti blocado, ante el Espanyol, pese al 0-6 final, fue fundamental para su equipo. Al minuto de juego, con 0-0 en el marcador, le hizo una parada imposible a Caicedo que allanó el terreno a su equipo. El partido pudo ser muy distinto. No contento con ello, el mejor portero del Mundial junto a Neuer, elegido en una ocasión mejor guardameta de la Liga, sacó una mano milagrosa a un cabezazo del mismo jugador. Cuenta con la confianza del técnico, como ha repetido Benítez en varias ocasiones, y de la afición. No hay quien pare ahora mismo a Keylor Navas, imbatido esta temporada.