Siesta, sopor, susto y gol de Griezmann

El Atlético saca adelante un partido ante un Rayo que no mereció perder. El tanto del francés, en la segunda parte, resolvió los problemas que mostraron los de Simeone

Simeone no quiso ser menos que Pep Guardiola, que reservó ocho jugadores para el partido del martes y optó por las rotaciones. Griezmann, Torres, Koke, Augusto y Savic, al banquillo porque lo de Múnich es una oportunidad única y en la Liga, ya lo dijo el Cholo, «hay pocas opciones». Las del Rayo pasan por la salvación y Jémez se plantó con un equipo ofensivo, de buen toque, pese a que faltaba su talismán Trashorras, dispuesto a plantarle cara al Atlético. La papeleta la resolvió Griezmann, que salió del banquillo para decidir, con un zurdazo un partido muy flojo de los rojiblancos ante un Rayo, que mereció más y que se fue con cara de tonto del Vicente Calderón.

El plan B no funcionó. Dormitó el equipo rojiblanco en el primer tiempo y el Rayo hizo mejor las cosas. Con pocas llegadas, pero con las ideas muy claras, fue el bloque de Jémez el que mostró más seguridad, el que puso más interés y el que buscó la portería de Oblak. El esloveno volvió a estar espléndido y abortó cualquier intento de Javi Guerra, Miku y Embarba, que fueron los que más le inquietaron.

Con Gabi al mando de la tropa juvenil el Atlético fue un equipo plano, sin rumbo, sin conceptos en el centro del campo y muy atolondrado. Sólo Correa le puso un poco de sangre en los comienzos. Vietto caía una y otra vez en fuera de jugo cuando los defensores rayistas daban un paso adelante. Óliver parece perdido para la causa. No se enteró, no apareció su pausa y se pasó el tiempo corriendo detrás de Jozabed y Tito. Thomas ofreció su peor versión porque no atinó a salir con el balón jugado y Kranevitter trató de hacerlo sencillo, sin alaracas.

El Rayo lo intentó siempre por la derecha y Gámez, a pierna cambiada, sufría en exceso cuando Lucas Hernández no le echaba una mano. Con Embarba llegaron los centros y las aproximaciones a la meta de Oblak. En el otro lado, Bebé –que tuvo una bronca con Jémez cuando fue sustituido – estaba mejor controlado por Juanfran. Giménez era el eje de la defensa y el encargado – lo hizo muchas veces–, de sacar el balón en largo, buscando los costados. Casi siempre le salió mal y la pelota fue para los defensores rayistas. Amaya y Crespo no tuvieron problemas y no les hizo falta la ayuda de Diego Llorente, encargado de ser el ancla de los vallecanos.

Simeone, desde el palco, no lo vio claro porque su equipo fue muy oscuro. Y mandó a Koke a poner orden. Y apareció un Atlético con algo más de ritmo tras el descanso. Un espejismo. En un minuto el Rayo pudo voltear el partido, pero Oblak lo impidió. Javi Guerra tardó en su remate y el meta reaccionó a tiempo. Luego, una mano providencial para mandar a córner un centro de Tito que se colaba.

Amagaba el Rayo y no daba. Y como el fútbol es cruel con el débil, llegó el gol de Griezmann cuando no llevaba ni un minuto en el campo. Una pérdida defensiva –cosa en la que tiene que mejorar el Rayo– y el balón en los pies del francés. Zurdazo del pichichi rojiblanco para batir a José Carlos. Sin merecerlo, sin juego, sin claridad, el Atlético encontreaba un tesoro. Y ya se sabe lo que es un gol en poder de los de Simeone.

Torres, que también había salido a echar una manita, no fue capaz de hacer el segundo tras un buen pase de Griezmann y el partido siguió en el alambre para el Atlético. El Rayo lo intentó por todos los medios. Jémez quitó a Amaya, metió a Manucho y jugó con defensa de tres. El centro del campo era suyo porque el Atlético no se asentaba, obligado a recular en exceso. Otro ejercicio defensivo de los de Simeone frente a un Rayo que llegaba, pero no acertaba a definir. Ahí estuvo la diferencia en una tarde en la que Griezmann y Oblak resolvieron los problemas de juego del Atlético.

Así ha sido el partido en directo

1 - Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Giménez, Lucas, Gámez; Óliver (Torres, m. 53), Gabi (Koke, m. 46), Kranevitter, Thomas; Vietto (Griezmann, m. 53) y Correa.

0 - Rayo Vallecano: Juan Carlos; Quini, Amaya (Manucho, m.63), Crespo, Tito; Embarba, Jozabed, Llorente, Bebé ((Piti, m. 58) (Jonathan, m.83)); Miku y Javi Guerra.

Gol: 1-0, m. 55: Griezmann, con un disparo fuerte desde fuera del área.

Árbitro: Sánchez Martínez (C. Murciano). Amonestó a los locales Kranevitter (m. 67) y a los visitantes Bebé (m. 36).

Incidencias: partido correspondiente a la trigésima sexta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Vicente Calderón ante unos 55.000 espectadores. Lleno. EFE