Torres reta a Cristiano

Torres, Ronaldo, Simeone, Ancelotti, ambiente, tensión, nervios... El Atlético y el Madrid se van esta noche de copas. Hay derbi en el Calderón.

Torres, Ronaldo, Simeone, Ancelotti, ambiente, tensión, nervios... El Atlético y el Madrid se van esta noche de copas. Hay derbi en el Calderón. De los buenos, entre dos equipos que se conocen, se respetan y se tienen ganas, porque la afrenta de Lisboa todavía escuece en los rojiblancos, pese a que el triunfo en la Supercopa y en la cita liguera del Bernabéu, del pasado mes de septiembre, amortigüen, en cierta medida, el disgusto y la decepción lisboeta.

¿Se tira la Copa? La eliminatoria llega muy pronto para ambos (dentro de un mes volverán a jugar en Liga), además, al vencedor le espera, si Luis Enrique no se vuelve loco, el Barcelona. Los entrenadores no se pronuncian. Son profesionales que asumen el riesgo de un mes, como enero, tan cargado de partidos. Y van a tratar de seguir en la competición con la mayoría de sus titulares.

Simeone anuncia el debut de Torres, pero reserva a Tiago, Arda, Siqueira y Mandzukic, que no están ni convocados. Y es que el domingo hay visita al Camp Nou, con el segundo puesto en juego, y pese a que el técnico argentino insiste en que ésa no es su Liga, que sus rivales son el Valencia, el Sevilla y el Villarreal, en lucha por una plaza en la «Champions», a nadie le amarga el dulce de ganar al Barça, en el estadio donde el año pasado el Atlético se proclamó campeón liguero con el cabezazo de Godín.

El resultado de hoy puede, pues, marcar el camino a elegir. El Atlético sucumbió en el Bernabéu en el pasado torneo (3-0) y se tomó la vuelta en el Calderón con calma. Fue la noche del mecherazo a Ronaldo y el Madrid repitió triunfo (0-2) y se plantó en la final, que ganó al Barça.

Por tanto, lo de hoy puede ser un primer asalto de tanteo. Un partido en que los dos equipos no arriesguen en exceso y apuesten por no encajar golpes. Con Simeone, la entrega, el trabajo y la intensidad están aseguradas. Con Ancelotti, el toque, la transición rápida y la pegada son virtudes indiscutibles. Quizá, el técnico italiano refuerce el centro del campo con Khedira y deje a James en el banquillo. Oficializada la titularidad de Keylor Navas, Varane también se apunta al once en sustitución de Sergio Ramos.

Para el Madrid, que parece que ha bajado un poco el pistón y que acusa el esfuerzo, el Calderón es un buen examen. La derrota en Mestalla no ha supuesto ningún sobresalto, el técnico no pierde la calma y las rotaciones, queda dicho, en su justa medida.

El que saldrá seguro es el «19» rojiblanco. Es el número de Fernando Torres, cuyas camisetas se venden como churros . La llegada de El Niño ha supuesto una bocanada de aire fresco. No es el salvador, pero es un jugador que puede aportar algunas cosas, pese a que lleva dos años en las catacumbas futbolísticas. Simeone le ha rescatado, le ve en condiciones de jugar y le da una oportunidad en un partido de los grandes. Para Fernando es un reto. Sabe que el Calderón le venera, pero llega la hora de la verdad. La de intentar que el Atlético logre un resultado que le permita viajar al Bernabéu (jueves día 15) con esperanzas de clasificación.

Y junto a Fernando Torres estará Raúl García en ataque, con Griezmann, Mario Suárez, Koke y Gabi por detrás. Será un 4-5-1 porque la posición del navarro servirá para reforzar la zona ancha. No es la primera vez que Simeone recurre a esta táctica. Cuando el equipo recupere la pelota se jugará al espacio; balones en largo para que Torres puede aprovechar su velocidad y su potencia. No hay misterios en el Atlético. Presión, intensidad y procurar sacar partido de la estrategia, tanto en las faltas laterales como en los saques de esquina.

Así es el Atlético. Un libro abierto que hoy contará con novedades en los laterales. Juanfran se desplazará a la izquierda para frenar a Bale, mientras que Gámez será el lateral derecho para cerrar a Cristiano o a Marcelo, porque sabido es que el portugués tiene libertad de movimientos en el frente de ataque.

Y la última novedad que nos depara el derbi desde el punto de vista rojiblanco es la titularidad de Oblak. Será el cuarto partido del meta esloveno por el que el club pagó 16 millones al Benfica. Llegó con vitola de ser el sustituto de Courtois, pero el buen trabajo de Moyá y las pifias en el partido de la «Champions» en Atenas le han condenado. Es joven, está aprendiendo, se esfuerza y Simeone le da una oportunidad en un choque de los importantes. Jugó contra el Hospitalet en Copa y encajó dos goles.

El Atlético contará con el apoyo de los suyos –faltaban ayer 3.500 entradas por vender– y habrá que saber cómo responderá el fondo sur, donde se ubicaba el Frente Atlético. El sábado ante el Levante el ambiente fue bueno. Es partido de alto riesgo y habrá fuertes medidas de seguridad.