Un equipo de trece jugadores

Los de Simeone volvieron al trabajo trece horas después del 1-1 ante el Málaga con estos tres jugadores con molestias, pero se espera que estén listos para el sábado frente al Barça.

«Nada ha cambiado», dice Simeone. Y nada cambia porque el Atlético sigue dependiendo de sí mismo. En Barcelona jugará su tercera final, ésta de verdad porque ya no habrá más posibilidades de lograr el título. Las otras dos las ha desperdiciado. Puede que sea la tensión, o simplemente el cansancio. Ocho de los futbolistas del Atlético han jugado más de 4.000 minutos esta temporada. A pesar de que en las últimas semanas se ha preocupado por repartir los esfuerzos, sus alineaciones son combinaciones de 13 jugadores tomados de once en once.

La portería

Courtois se ha convertido en el mejor portero del campeonato. Su seguridad ha salvado muchos puntos para el Atlético en la Liga y alguna eliminatoria en los torneos de Copa. Un error suyo precedió al gol del Málaga en el último encuentro, pero es sólo eso. Un error. Por segunda temporada consecutiva el guardameta del Atlético es el menos goleado del campeonato. Lo ha jugado casi todo. Y cuando no lo ha hecho, como en Almería, el equipo lo ha echado de menos.

La defensa

Juanfran, Miranda, Godín y Filipe Luis. Es la misma defensa con la que el Atlético cayó eliminado en la Copa ante el Albacete justo antes de la llegada de Simeone. Esos cuatro hombres se han convertido ahora en la mayor fuente de tranquilidad para el entrenador rojiblanco. Y, además, todos aportan algo en ataque. Los dos centrales han marcado goles importantes cuando llegan al área contraria para rematar los córners. Los laterales son extremos cuando el Atlético tiene la pelota y llegan al final en uno de sus mejores momentos de la temporada. Es la línea en la que menos rota Simeone.

El centro del campo

La gran aportación del Cholo ha sido el crecimiento de Koke como futbolista. Después de un pequeño bajón en la mitad de la temporada ha recuperado el nivel que le convierte en uno de los indiscutibles para Vicente del Bosque para el próximo Mundial. Se ha especializado en la pelota parada, un recurso al que el Atlético ha sacado mucho rendimiento desde que lo dirige el argentino. Él y Gabi, otro de los fijos, son las bases sobre las que se asienta el centro del campo rojiblanco. El otro puesto al lado del capitán se lo reparten Tiago y Mario, aunque ha jugado más el portugués por las lesiones del internacional español. Arda y Diego se reparten el único puesto que Simeone reserva a la imaginación.

La delantera

Diego Costa ha sido la referencia y Villa, que llegó para cubrir el hueco que dejaba Falcao, se ha visto superado por Raúl García en la competencia. El navarro ha disputado más minutos que el ex barcelonista. Villa, además, anda reñido con el gol últimamente. En los últimos partidos, Simeone ha recuperado a Adrián, que parecía perdido para la causa.

Diego Costa, el enigma

El juego del Atlético no se concibe sin un delantero como Diego Costa. Su velocidad para aprovechar los pases de sus compañeros al espacio es fundamental para que el equipo de Simeone se exprese de manera completa. Por eso lo guardó en el último partido contra el Málaga. Quedaba otra oportunidad contra el Barcelona y no quería arriesgarse a perderlo para el partido decisivo si el Atlético no ganaba el título, y también para la Liga de Campeones. El gol en el Atlético sigue siendo del hispanobrasileño.