Una semifinal sin balón

Atlético y Chelsea lucharán por que la pelota la tenga el otro para aprovechar sus eroores. «Las palabras sobran», dice Simeone.

«Nada cambia. Sólo el tiempo», dice Mourinho cuando le preguntan si ha perdido la alegría que exhibía hace dos semanas. Tiene razón Mourinho, nada cambia. A pesar de la distancia, el entrenador del Chelsea mantiene la misma obsesión por llamar la atención y ser el protagonista único de todo lo que le rodea. «¿Puede responder en español?», le preguntan. «Lo haré en inglés», dice tan educado como siempre. El portugués no ha perdido su gesto de pereza ante la Prensa, aunque se siente feliz en un escenario como el de ayer, con casi 200 periodistas en la sala Vip del Vicente Calderón. La sala de prensa se quedaba pequeña y, como ya sucedió en la eliminatoria anterior ante el Barcelona, el Atlético habilitó el escenario de las grandes ocasiones.

No se permite sonreír el técnico del Chelsea. Tampoco Simeone, pero mientras el portugués se niega a hablar del Atlético –«hablo de él con mis jugadores, no con ustedes»–, Simeone intenta explicar cómo será la eliminatoria. «No somos iguales, aunque tenemos situaciones similares», reconoce. «Ellos son los menos goleados en su liga, nosotros en la nuestra, los dos nos caracterizamos por un buen trabajo defensivo, un juego más o menos directo y buena pelota parada a favor», afirma el preparador rojiblanco. «Son similitudes que a ellos les dan la posibilidad de seguir peleando la liga inglesa y a nosotros de liderar la española», añade.

Son dos equipos que muestran un tremendo desinterés por la pelota. «No quiero la posesión», suele decir Simeone. Mourinho no lo dice, pero el efecto es el mismo. «Sabemos cuáles son nuestras virtudes y nuestros defectos», asume el entrenador del Atlético. «Tratamos de potenciar nuestras virtudes y esconder nuestros defectos», añade. A eso mismo juega el Chelsea. Son dos equipos que se definen por lo que hacen los demás, fuerzan los errores del contrario para aprovecharlos. La pregunta, entonces es ¿qué hacemos con la pelota?

Nadie la quiere y si el partido no lo define la pelota lo definirán otras cosas. «Respetamos su bloque. Es un equipo muy parecido a nosotros, muy trabajado, que defiende muy bien», asegura Raúl García. «Será un partido muy físico y el aspecto táctico estará muy presente», añade. «Me imagino un partido apretado, decidido por detalles, por calidad técnica individual. El que mejor trabaje el aspecto colectivo es el que más posibilidades va a tener de ganar», analiza Simeone.

El preparador rojiblanco es consciente también del peso de lo anímico antes de una semifinal. «En estos momentos, las palabras sirven para poco. Son horas de hechos. Hablaremos con los jugadores cuando llegue el momento de manera espontánea. Es la mejor manera de expresar un sentimiento», advierte Simeone. Se trata de sentimientos, entonces. «Puede que haya mejores jugadores en los equipos a los que nos vamos a enfrentar, pero más ilusión y más pasión que nosotros, pocos», dice el entrenador del Atlético, que hace suyas las palabras del capitán, Gabi.

Simeone demuestra su admiración hacia Mourinho. «Es mejor entrenador que yo», reconoce. «No se puede comparar a un entrenador con quince años de carrera con otro que no tiene tantos», responde Mou. El portugués disputa su octava semifinal de «Champions», un hecho que parece anular el mérito que se atribuía por haber alcanzado tres con el Real Madrid. Por separado, los dos han llegado al mismo sitio. También ha llegado el Atlético, que busca su primera final en cuarenta años.

Alineaciones probables:

Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Raúl García, Mario, Gabi, Koke; Villa o Diego Ribas y Diego Costa.

Chelsea: Cech o Schwarzer; Cahill, Terry, Luiz, Azpilicueta; Ramires, Matic; Salah, Willian, Schürrle; y Eto'o.

Árbitro: Jonas Eriksson (Suecia).

Estadio: Vicente Calderón.

Hora: 20.45, TVE-1.