Torneos de Golf

Que nadie se despiste, que ya he llegado

Cuando Jon Rahm terminaba el primer día con 75 golpes muchos pensábamos que ya tendría la cabeza más puesta en el Open de España que en la gloria de Augusta, pero craso error, porque el vasco ha demostrado galones y que su cabeza está donde debe, torneo a torneo, y se ha aupado al cuarto lugar, a solo seis del liderato y con la mejor ronda del día

La Razón
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Quien pensara que Jon Rahm iba a entregar la cuchara tan pronto estaba equivocado de principio a fin. El martillo de Barrika ha demostrado tener una vuelta de tuerca más, un conejo más en la chistera y se sacaba una ronda de 65 golpes (eagle y cinco birdies) con la que dar un golpe de efecto y colocarse cuarto.

La mejor vuelta del día, junto con la de Rory McIlroy (segundo) y Rickie Fowler (tercero), le permitía recortar dos golpes a un intratable Patrick Reed (67) y situarle en el trío de perseguidores, realmente en el único grupo de perseguidores que parece tener opciones, por mucho que por detrás suyo esté a un golpe Henrik Stenson, a dos Bubba Watson y Tommy Fleetwood, a tres Justin Thomas y Jordan Spieth y a cuatro Dustin Johnson, todos ellos castigados este tercer día con rondas de 68 o más salvo Fleetwood.

Así pues, tres contra 1, o cuatro contra 1, pues lógicamente también entrará en juego y tendrá mucho que decir el propio campo, ya que no sabemos si a Augusta le gustará el desempeño que está realizando Reed, quien puede convertirse en el primer jugador en conseguir la chaqueta verde con cuatro vueltas por debajo de 70, algo que en las 81 ediciones anteriores nadie ha logrado (Ben Hogan en 1953, Arnold Palmer en 1964, Fred Couples en 1992, Ben Crenshaw en 1995 y Tiger Woods en 1997 y 2001 se quedaron a 18 hoyos de lograrlo).

Pero hablemos de Rahm. Lo cierto es que su inercia está siendo cada vez más positiva y en esta ocasión se volvió a dejar la presión en casa y la cambió por un kit de escalada con el que ir ascendiendo la cima de la clasificación. Golpes bien dirigidos a la calle, sin estridencias y dos birdies en los dos primeros, magnífico comienzo. Aguantó y en el 8 llegó el eagle para después, en el 13, salvar el par tras irse al agua, compensando después con dos birdies más en el 16 y el 17, igualando la mejor vuelta española en este campo, honor que recaía en los hombros de Álvaro Quirós.

Su camino hacia un posible título pasará por empezar de nuevo restándole golpes al campo y meter presión a los tres de arriba, de esa manera, y sin sobreexcitarse demasiado, la primera piedra estará puesta, luego ya...decidirá Augusta.

Por su parte, Patrick Reed sigue jugando (y aguantando) de escándalo. No se está complicando o más mínimo y suma una gran efectividad. En esta ocasión terminó con 67, con dos eagles (13 y 15), cuatro birdies y tres bogeys.

Ojo justo por detrás con McIlroy y Fowler, grandes amenazas (especialmente McIlroy, en busca del Major que le falta)

Por su parte, Rafa Cabrera Bello está algo más abajo y no ha podido sumarse siquiera al segundo carro de perseguidores. Al canario le encontramos en el puesto 36 tras terminar con 74 impactos y demasiados bogeys (cinco) por tan solo tres birdies. Con un golpe más que él está Tiger Woods, otro que dice adiós a un posible y sorprendente alirón, pues únicamente podía rebajar hasta los 72 golpes tras comenzar con dos bogeys y sumar otro en el 15 además de birdies en el 6, el 8 y el 16. El objetivo de ambos pasará por hacer 70 o alguno menos e intentar escalar hasta el top 20, meta que tienen a cuatro y cinco golpes, respectivamente.

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