Isco y Asensio, ganarse al entrenador

Necesitan hacerse un hueco en el plan de Solari que, durante sus primeros quince días, no ha contado con ellos.

Isco y Asensio protagonizaban, después de cada título, uno de los vídeos que más recorrido tenía por las redes sociales. Eran tiempos felices para ellos, cuando el primero se había hecho con el puesto en el equipo titular y del segundo sólo se hablaban maravillas y sin prestar atención a lo que podía estar haciendo mal. Ahora Isco y Asensio se vuelven a enfrentar al reto de superar las primeras ideas de un entrenador. Solari, por ahora, no los ve como titulares y ya no es un entrenador de paso para quince días. Esta semana ya está trabajando con todos los jugadores como el hombre al mando. E Isco y Asensio, que podían pensar que estaba de paso, no tienen más salida que convencerle.

Firmar un contrato largo a un entrenador es un mensaje a los futbolistas, un modo de darles a entender quién manda. Solari sabe que lo que ha firmado con el Madrid no tiene más valor que ese, pues su futuro no lo va a marcar lo que diga el contrato, sino su capacidad para llevar al grupo al éxito.

No va a hacer muchas variaciones el entrenador en su forma de actuar frente al grupo ni frente al club. Lo único es que va a profundizar en algunas de las decisiones que ya ha ido tomando. Habrá que ver cómo afecta eso a Asensio e Isco.

Asensio ha vivido unos días turbulentos en la Selección, que probablemente no han ayudado a su tranquilidad. Este tenía que ser su año: con Lopetegui en el banquillo empezó siendo titular en todos los encuentros de Liga. Ahora, parece la opción que siempre descarta Solari cuando imagina el once. No le encuentra el sitio adecuado y la baja forma del futbolista tampoco ayuda a que se esfuerce en buscarlo. Para Asensio llega un momento decisivo. Tiene que hacerse notar, tiene que convertirse en importante antes de que el técnico escoja un equipo para los días importantes. Isco es un caso con ciertos parecidos. Tras la apendicitis aún no ha recuperado del todo el tono físico. Lo tiene que lograr antes de que Solari decante sus preferencias.

Deben hacer los méritos que antes hacía Lucas Vázquez con Lopetegui. Con el argentino en el equipo, el extremo ha descubierto que tiene muchas más posibilidades de jugar que si hubiese seguido Julen o si hubiera llegado otro técnico. Antes Lucas parecía resignado a su suerte. Solari, por ahora, apuesta por un fútbol más abierto. El extremo mira alrededor y ve que en su posición no hay tantos especialistas. Bale puede jugar por el otro lado, como Vinicius, pero por la derecha hay dos laterales largos, pero no futbolistas de ataque. «Desde el cambio de entrenador estoy teniendo más minutos», ha asegurado el extremo. Creía que esta temporada iba a ser una de las más grises desde que volvió al Madrid, pero piensa ahora que puede ser una de las alternativas habituales, incluso titular.

Sabe Keylor Navas lo que pasa cuando el elegido es otro y puede explicárselo a Isco y Asensio. El portero es el gran perjudicado en la nueva época del Madrid. Con Lopetegui, el guardameta iba a tener minutos al turnarse con Courtois. Solari, sin embargo, considera que en la portería no puede comportarse como en otras posiciones. Necesita un guardameta que no crea que un error puede hacerle perder su oportunidad.

Courtois, que ayer volvió a los entrenamientos, es el elegido. Y ya no hay ninguna provisionalidad en eso.