Llorente: Una lesión de lo más inoportuna

Solari pierde un efectivo y retrasa una decisión: mañana juega contra el Villarreal el primer partido del año, la jornada aplazada por el Mundial de Clubes, y el técnico tenía que decidir por primera vez si seguir apostando por Marcos Llorente para el puesto de mediocentro o dar paso a Casemiro, ya recuperado plenamente de su lesión. Pero la desgracia se ha cebado con el joven jugador madridista. El regreso de las vacaciones no le sentó bien, ya que mediada la tarde de ayer, después del entrenamiento del equipo en Valdebebas, la entidad que preside Florentino Pérez hizo público un comunicado: «Tras las pruebas realizadas hoy [por ayer] a nuestro jugador Marcos Llorente por los Servicios Médicos del Real Madrid, se le ha diagnosticado una lesión de grado 2 en el aductor izquierdo. Pendiente de evolución». El elegido para el duelo de La Cerámica ante el Villarreal, por tanto, será Casemiro, imprescindible en las conquistas del conjunto blanco las últimas temporadas.

La lesión no es grave, le tendrá unas dos semanas fuera de los terrenos de juego, con el cuidado que hay que tener siempre con las molestias musculares, que mal curadas puede derivar en una recaída tras otra. El problema es para el joven futbolista, que ve cortada así una gran racha que comenzó hace poco más de un mes. Marcos Llorente, canterano, que el 30 de enero cumple 24 años, salió cedido para foguearse y después de brillar en el Alavés hace dos temporadas, parecía preparado para dar el salto al primer equipo del Real Madrid. Le costó mucho. Un jugador con buen manejo de balón y un gran despliegue, con mando en los partidos, se mostraba tímido en las oportunidades que le daban. Ni Zidane ni Lopetegui contaron con él, y tampoco lo hizo Solari al principio, aunque después se ha convertido en un fijo. El centrocampista fue titular contra el Melilla en Copa en el estreno del nuevo entrenador, pero después se quedó fuera de la convocatoria en algunos partidos, como contra el Valladolid, el Viktoria Plzen o el Celta. Ni la lesión de Casemiro le daba una oportunidad, ya que el preparador argentino probaba con Ceballos como tercer centrocampista. Su salida en el mercado de invierno parecía la opción más probable, pero en el partido de la Champions contra la Roma llegó su momento: aprovechó los minutos y fue hacia arriba sin ponerse límites. Desde ese día (27 de noviembre) se convirtió en un fijo, con siete titularidades más consecutivas, ante Valencia, Melilla, Huesca, CSKA, Rayo Vallecano, Kashima y Al Ain. En el Mundial de Clubes, en el que reapareció Casemiro, pero no le quitó el puesto, Llorente siguió creciendo, al ser nombrado mejor jugador de la final, en la que además anotó un gran gol. En Abu Dabi afirmó que se quedaba en el Madrid, algo de lo que ya no quedaban dudas. En esos ocho partidos seguidos saliendo desde el inicio, sólo fue sustituido en tres, para acumular un total de 636 minutos. Ahora se perderá seguro los duelos de Liga contra el Villarreal, la Real Sociedad y el Betis, y los de la Copa del Rey, al menos la ida, contra el Leganés, pertenecientes a los octavos de final. El dilema del mediocentro de Solari se podría trasladar al encuentro contra el Sevilla que se disputará el 19 de enero en el Santiago Bernabéu.

La lesión de Marcos Llorente, un jugador que cuida mucho la alimentación (hace la Dieta paleolítica) y el descanso, es un capítulo más dentro de la mala suerte que está teniendo el Real Madrid desde que comenzó la temporada. Son pocos los que pueden presumir de no haber pasado por la enfermería, con dolencias mayores o menores. Se han librado Casilla, que es el tercer portero y no ha tenido minutos; Courtois, el guardameta titular indiscutible desde la llegada de Solari; Lucas Vázquez, también indispensable desde la llegada del preparador argentino; Vinicius y Modric, que sí ha rotado más de lo habitual por la acumulación de esfuerzos, ya que disputó la final del Mundial. El entrenador del Real Madrid ha ido recuperando efectivos y ahora sólo están descartados para las próximas fechas Llorente, desde ayer, Mariano, que sí se entrenó ayer, pero en solitario, y Asensio. Solari contó para la primera sesión del año con los canteranos Javi Sánchez y Cristo.