Una final de récord para Lima y la leyenda de Pehuajó

Era la final 250 de Fernando Belasteguín, hombre humilde en su discurso ganador a pesar de haber conseguido incontables títulos y llevar 15 años seguidos como número 1. Era su final, y quería ganarla, y qué mejor escenario que la Barcelona donde vive desde hace años, ante su público, y frente a una pareja llamada a suceder su dominio al frente de la clasificación (3-6y 1-6).

Fernando Belasteguín y Pablo Lima partían como locales ante Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez y querían igualarles en el casillero de victorias esta temporada, para lo cual comenzaron con su infatigable modo de 'Depredadores', ajustando sus tiros y no dejando que Paquito y Sanyo pudieran hilvanar su ataque como en ellos suele ser habitual.

El primer parcial empezó terriblemente parejo, midiéndose ambas duplas, como si diesen vueltas alrededor del ring para calcular la fuerza de sus oponentes. 1-1, 2-2, 3-3...hasta ese momento todo marchaba por los cauces habituales, pero entonces apareció el maestro de Pehuajó, Bela, quien metió en su dinámica mental a su compañero, esa dinámica en la que, una vez entra, es complicado que salga hasta el último punto y con la que consigue avasallar a quien se ponga enfrente.

Bela, como decimos, puso la directa para cerrar el primer set gracias a un break a su favor que consolidó posteriormente con su saque, haciendo inoperantes los remates de Navarro y provocando los fallos de un Sanyo que no terminaba de entrar en el partido.

Tras terminar este set, al segundo entraron de la misma manera, pero las distancias fueron aun mayores. A pesar de intentarlo, Bela fue muy superior, levantando al público cada vez que salía de la pista, siempre con resultado favorable para él y a su lado se contagió de la dinámica ganadora su compañero brasileño. Lima comenzó a crecer y con su ferviente defensa desde el fondo unida a su potencial aéreo, los números uno fueron ganando en confianza, agresividad y distancia en el luminoso.

Así, con una bandeja de Bela a la que no pudo responder Paquito, se ponía en el marcador el definitivo 1-6 que confería la segunda victoria del año para el argentino y el carioca, igualando los registros de sus rivales. Dos a dos y ya con la mirada puesta en el siempre complicado por el calor Valladolid Open, que tendrá lugar a partir del próximo 18 de junio.

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