Robredo, «muy cansado» tras acceder a octavos, pone la vista en Federer

El español Tommy Robredo logró hoy acceder a octavos de final del Abierto de Estados Unidos tras un duro partido contra el británico Daniel Evans del que salió "muy cansado"por un reciente problema en un cuádriceps, pero ahora pone la vista en su duelo con el exnúmero uno Roger Federer.

"Hoy ha sido duro, había mucha humedad y al principio me sentí muy cansado", dijo el catalán en una rueda de prensa tras ese partido que ganó por 7-6 (6), 6-1, 4-6 y 7-5 en 3 horas y 13 minutos frente a Evans, que había accedido al cuadro principal a través de la fase de clasificación.

El británico de 23 años, que en su paso por el último Grand Slam del año había logrado batir al número 12 de la clasificación mundial ATP, el japonés Kei Nishikori, y al australiano Bernard Tomic, dio la batalla tal y como se esperaba Robredo, que sabía que su rival era un jugador "peligroso"que "corta mucho de revés".

A la confianza con la que llegaba Evans se unió un bajón físico del español, que aseguró que los últimos días ha tenido "un problema en un cuádriceps"que lleva "bastante cargado", por lo que requirió de la asistencia de un fisioterapeuta durante el partido. "Cuando se juegan partidos duros, el físico a veces va tocado", añadió. "Al final del partido él era el que estaba mandando, yo tenía que haber estado agresivo", reconoció el de Hostalric, número 22 del mundo y decimonoveno cabeza de serie, quien en todo caso afirmó que "a veces es más importante ganar estando mal físicamente".

Ahora le espera un día de reposo para prepararse para el que seguramente será otro duro partido, el que tendrá que disputar con el suizo Roger Federer, séptimo favorito y quien accedió hoy a la cuarta ronda tras ganar sin complicaciones al francés Adrian Mannarino por 6-3, 6-0 y 6-2 en apenas 1 hora y 21 minutos.

Robredo ha perdido los diez partidos que ha disputado con Federer a lo largo de su carrera, lo que aseguró es "normal cuando juegas con uno de los mejores jugadores de la historia"del tenis, aunque dice hará todo lo posible por "hacerle daño"y que "no todos los puntos sean de 'olé' para el público, que es lo que le gusta".

"Es una oportunidad muy bonita jugar en una pista central con Federer, al final jugamos para estos espectáculos, jugar cuando hay cien personas mirando es muy bonito, pero con 26.000 es espectacular", aseveró.