...Y la puerta se abre para De Gea

La semana que viene habrá movimientos.

Sin Iker Casillas, De Gea es el elegido para ser el portero del futuro del Real Madrid. A sus 24 años, curtido en el fútbol inglés, donde ha ganado cuerpo y experiencia en el choque, el futbolista y el club tienen muy claro que deben que escribir juntos esta nueva etapa que empieza ahora que el capitán se marcha. Lo que no saben, lo que no sabe nadie en estos momentos, es a partir de cuándo: si la próxima temporada, al finalizar su contrato con el Manchester y desde enero se puede hacer oficial su acuerdo con el Madrid, o ya desde este verano, si el conjunto inglés cede en sus pretensiones económicos. Con ese calendario, en el Santiago Bernabéu se manejan con mucha calma, convencidos de que no son ellos los que tienen que ceder, que son ellos los que pueden permitirse ese lujo que es la paciencia.

Si no es ahora, será después, pero nadie duda de que será. Es verdad que tanto el Madrid como David de Gea prefieren hacerlo cuanto antes para no perder una temporada, pero ambos aguantarán lo que sea necesario. Tampoco estaba previsto que se incorporase a la disciplina del United después de las vacaciones y no le ha quedado más remedio que hacerlo porque no quiere terminar mal con el club inglés. Está por ver si al Manchester le interesa contar con un jugador que ya ha dejado claro su deseo de marcharse y del que, en seis meses, no va a poder obtener ningún rendimiento económico.

El problema del Manchester con De Gea, sus pegas a dejarle salir, es que se ha convertido en un factor importante en la otra negociación entre ambos clubes por Sergio Ramos. El conjunto que entrena Van Gaal quiere contar con el central blanco y sabe que va a tener que hacer un esfuerzo económico para ficharle. Por eso, pretende subir todo lo que sea posible el precio del portero al Real Madrid para que éste baje el del central.

Aunque van por separado, son dos negociaciones que es complicado no unir. A la de Ramos le falta que se presente una alta oferta por él. La de De Gea se encuentra en punto muerto, pero que se confía en que sea la semana que viene cuando se comience a desbloquear. Sin Iker, el asunto toma otro color. Benítez ya no cuenta con el futbolista para la gira que empieza el domingo y si no hay cambio de planes, De Gea hará la pretemporada con el conjunto inglés, a las órdenes de Van Gaal.

No preocupa en exceso eso en el Madrid. No sería la primera vez que un futbolista aterriza en el conjunto blanco a poco de comenzar la temporada o después de haber empezado. Bale se hizo una pretemporada en solitario mientras Madrid y Tottenham peleaban duramente entre ellos y Ronaldo Nazario se presentó en el Bernabéu en un partido de Liga contra el Alavés.

Hasta principios de septiembre no cierra el mercado de fichajes y hasta entonces aún pueden pasar muchas cosas. De Gea se entrena con normalidad en Mánchester mientras espera acontecimientos. Sus dudas, poco a poco, se van resolviendo. Al principio dudaba del traspaso porque no sabía quién iba a ser el entrenador del Madrid, después le pesaba la sombra de Casillas y todo lo que significa pelear contra una leyenda. Ya sólo tiene certezas: quiere ser jugador blanco, quiere ser el heredero de Casillas y vivir en la capital de España.