440 euros de ahorro en el IRPF para 3,5 millones de personas

Los ingresos tributarios marcarán un nuevo récord y subirán en 12.000 millones de euros.

El Estado prevé unos ingresos tributarios récord de 210.015 millones de euros, lo que supone un 6% más que la recaudación del año pasado. Es decir, 12.000 millones de euros más de ingresos fiscales. Una estimación que Hacienda considera «favorable» debido sobre todo al «efecto positivo del crecimiento económico y la continua mejora de las bases imponibles». En este sentido, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, rechazó las críticas acerca de haber hecho una proyección de ingresos demasiado optimista.

El principal impuesto por volumen recaudatorio volverá a ser el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), para el que se calculan unos ingresos de 82.056 millones de euros (+6,5% respecto a lo recaudado el año pasado). Este incremento de debe a la estimación del Ejecutivo de que las rentas de los hogares crezcan este ejercicio un 4,5%, así como a la previsión de crecimiento de las rentas salariales (4,8% más), y la masa de las pensiones (3,5% más).

El IVA recaudará 71.575 millones (+5,6%), fundamentalmente por el crecimiento del gasto final sujeto al impuesto, que el Gobierno espera que aumente el 5% en 2018. El resto del aumento de la recaudación por IVA se explica por la evolución de las devoluciones a realizar este año, que aumentarán menos que los ingresos. La rebaja de tipo en algunos servicios como espectáculos en vivo y el cine no tendrán una repercusión significativa en términos recaudatorios, ya que su impacto se calcula en apenas 70 millones de euros.

El Impuesto sobre Sociedades ingresará 24.258 millones (+4,8%). La previsión se basa en un aumento de los beneficios y de la base imponible en torno al 8%, lo que repercutirá en que los pagos fraccionados (principal componente del impuesto) crezcan alrededor del 6%.

Los Impuestos Especiales crecerán un 6,4% hasta los 21.612 millones de euros en 2018. Esto se explica por el aumento de los consumos físicos y en los precios que giran sobre el valor, sobre todo las labores de tabaco y la electricidad.

Para el Gobierno, «esta mayor recaudación es compatible con una rebaja impositiva en el IRPF dirigida a las familias y a las personas con menores rentas». Se eleva el umbral de tributación desde los 12.000 euros actuales hasta los 14.000, de manera que quienes cobren un salario comprendido en este tramo dejarán de tributar por IRPF. Asimismo, se rebaja el impuesto para los salarios brutos entre 14.000 y 18.000 euros. La rebaja supondrá un ahorro medio de 440 euros al año para 3,5 millones de contribuyentes, de los cuales cerca de un millón son pensionistas.

Por otra parte, la reforma del IRPF incluye una ayuda a la natalidad, que incrementa en 600 euros la deducción por cada hijo que supere el mínimo establecido para las familias numerosas, y una ayuda de guardería que permitirá la deducción de hasta un máximo de 1.000 euros por año para las madres trabajadoras por gastos de guardería de niños entre cero y tres años. También se amplían los cheques familiares actuales, con una nueva deducción de 1.200 euros anuales por cónyuge con discapacidad.