Intervención del Banco Madrid
Banco Madrid se vendió a BPA por su buen nombre y su solvencia
Fernández Ordóñez la prefirió frente a otras entidades del Principado.
La Banca Privada d’Andorra no fue la única entidad interesada en hacerse con el control de Banco Madrid cuando la Caja de Ahorros de Guipúzcoa y San Sebastián (la Kutxa) decidió ponerlo en venta en el año 2010, ante la falta de resultados positivos y los problemas derivados de la suspensión de pagos de inmobiliaria Monteverde, que se tradujo en una provisión de 170 millones en la cuenta de resultados de la caja.
La práctica totalidad de los bancos domiciliados en el principado pusieron su ojos en Banco Madrid en unos momento muy delicados para el sistema financiero español, que acababa de dar sus primeros pasos para su reordenación, especialmente en el campo de las cajas de ahorros, las más afectadas por la crisis internacional.
El Banco de España, gobernado entonces por Miguel Ángel Fernández Ordóñez, se decantó por BPA, según ha sabido LA RAZÓN por su buen nombre y su acreditada solvencia. Entre los candidatos estaba el actual Andbank, una entidad surgida de la fusión del Banc Agricol i Comercial d’Andorra y la Banca Reig en 2011. Un año después cambió su denominación social.
Andorra es un país cuya riqueza depende en buena parte del sistema financiero. Según los cálculos, una quinta parte de su PIB está pendiente de los bancos, orientados a la gestión de grandes patrimonios. El resto de la riqueza del país proviene esencialmente del sector turístico.
La intervención del BPA (la matriz de Banco Madrid) por parte de las autoridades andorranas y de BM por el Banco de España ha levantado las primeras ampollas en el sector. Según fuentes financieras del Principado, la banca andorrana ha constatado varios movimientos «desleales» por parte de algunas entidades españolas y suizas para «robarle» clientes aprovechando la crisis de BPA por supuesto blanqueo de capitales.
Las sospechas de las entidades de Andorra se fundamentan en la denuncia que les han trasladado los propios clientes. Entre las entidades estarían algunos bancos medianos, que han mostrado un interés especial en los clientes de BPA, caracterizados por mover grandes cantidades de dinero, según las mismas fuentes. «Los bancos de Andorra han crecido mucho en los últimos tres años y se han convertido en competidores muy fuertes para las entidades españolas», esgrimen fuentes conocedoras, que subrayan que los comerciales de los bancos españoles se están poniendo en contacto con clientes andorranos para tratar de convencerles «con rumores infundados», informa Ep.
Para aclarar la situación, la banca andorrana incide en que el país dejó de ser considerado un paraíso fiscal en 2010 y recuerdan que desde 2017 la Agencia Tributaria podrá requerir información a las entidades sin necesidad de ningún intermediario. «Los bancos andorranos hicieron los deberes en su momento. Existe una campaña de confusión y de contaminación desde España», lamentan las mismas fuentes.
Pese a la intervención de BPA, que derivará en la previsible liquidación de esta entidad y de Banco Madrid, las entidades financieras de Andorra aseguran que no se ha producido una «salida neta» de dinero, si bien reconocen que se ha ralentizado la entrada de fondos. «Ahora la banca andorrana está más centrada en explicar a sus clientes la situación. Ahora prima el diálogo», aseguran desde el sector financiero del Principado.
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