Reestructuración bancaria
Draghi pone como ejemplo la reforma bancaria española
De Guindos cree que el sector financiero es hoy «mucho más fuerte»
Los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro confirmaron ayer en Bruselas la solvencia de la banca española después del éxito cosechado en la aplicación de las reformas en el sector, aparejadas al programa de rescate internacional. En el mismo sentido, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, puso de ejemplo a España, junto con Italia, Holanda y Reino Unido, sobre cómo reformar el sistema financiero para apoyar el crecimiento económico de un Estado miembro de la eurozona.
En una comparecencia ante la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo (PE), Draghi señaló la importancia de la política macroprudencial para asegurar la estabilidad financiera en los estados miembros. En este sentido, apuntó que el Banco de España se ha encontrado «en la necesidad de asegurar que el refuerzo del sistema bancario continúa y para ello ha recomendado que las instituciones de crédito limiten las distribuciones de dividendos y aseguren en todo momento niveles adecuados de capital», explicó ante los eurodiputados.
El italiano destacó los esfuerzos hechos por España para reducir el nivel de endeudamiento, lo que ha conseguido que la deuda de los hogares sea más baja hoy de lo que era en 2007. Pero también se mostró impotente para resolver otro de los grandes problemas en España: la financiación de las pymes, pues no dispone de un instrumento directo que obligue a los bancos a prestar dinero a las empresas. «No creo que sea adecuado forzar a prestar a clientes en los que existe el riesgo de que no devuelvan esos préstamos», dijo. Además, recordó que un reciente sondeo del BCE a pymes recogía que su principal problema era la falta de clientes, por encima de la falta de acceso al crédito. «Pedimos a los bancos que amplíen el crédito, pero cómo vamos a decirles que den crédito a una empresa que no tiene clientes», indicó.
Los halagos no terminaron ahí, ya que el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, señaló al término de la reunión que «hemos celebrado que el programa sigue yendo por el buen camino». «España ha cumplido hasta ahora las condiciones del programa y respetado todos los plazos», resaltó. «Hemos invitado a las autoridades españolas a mantener el impulso reformista», explicó Dijsselbloem.
El comisario de Economía, Olli Rehn, indicó además que es su responsabilidad el seguimiento del programa español, y constató que éste «ha permitido mejorar la situación del sector bancario». «Vemos que ya está volviendo a una situación de saneamiento», añadió.
No más de 41.000 millones
El Eurogrupo analizó el exitoso resultado del tercer informe de la troika sobre el programa de ayuda internacional, de 41.000 millones de euros, concedido al sector bancario español para su reestructuración.
«Es un informe que señala que se van cumpliendo todos los hitos, que se van cumpliendo todas las condiciones que se habían establecido para el sector bancario español y que además el sector bancario español no necesita más capital», planteó el titular de Economía, Luis de Guindos, que calificó el informe de «positivo».
A su juicio, lo fundamental «es que el sistema bancario español es hoy mucho más transparente, está mucho mejor capitalizado y es mucho más solvente de lo que era hace sólo un año», argumentó De Guindos. Por lo tanto, se puede concluir que se van cumpliendo todas las etapas, de modo que «el sistema bancario español es mucho más fuerte de lo que era antes del inicio de este programa de asistencia financiera».
De cara al futuro, para el titular de Economía esto demuestra que España es capaz de asumir la supervisión del sistema bancario cuando expire el rescate. Incluso, que el informe de la troika «recoge positivamente las medidas recientes que ha tomado el Banco de España en relación con las refinanciaciones».
El Eurogrupo confirmó así que no tiene intención de utilizar más dinero del programa, que podría haber movilizado hasta 100.000 millones, de los que se ha gastado algo más de 41.000, puesto que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) están funcionando bien. No obstante, el organismo europeo reclama al Gobierno español que mantenga una vigilancia reforzada sobre el sector financiero por considerar que todavía hay riesgos debido a la mala situación económica y a la caída del sector inmobiliario.
Dado que todavía queda un cuarto y último informe de la troika, el próximo otoño se analizará dar algún tipo de continuidad al programa, en especial para asegurar que las entidades españolas sean capaces de afrontar por sí solas la cobertura de las nuevas exigencias de provisiones para los créditos refinanciados por el sector, que ascenderán a unos 10.000 millones de euros.
Desahucios andaluces
El único punto preocupante para la troika es el referido al decreto andaluz antidesahucios, que el Gobierno español ha decidido recurrir ante el Tribunal Constitucional. Aunque la Comisión Europea ha dejado en manos del Ejecutivo de Mariano Rajoy esta normativa, que prevé la expropiación temporal de viviendas a la banca, Bruselas opina que se ponen en riesgo los objetivos del rescate bancario y retrasará la recuperación del sector inmobiliario.
Por ello, hace unos días el Ejecutivo comunitario envió a las autoridades españolas una carta en la que expresa sus inquietudes, y la consejera andaluza de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía, Elena Cortés, viajará mañana a Bruselas para encontrarse con representantes del departamento de Asuntos Económicos del Ejecutivo comunitario para defender la legalidad del decreto.
Cortés recordará a los representantes de la Comisión que el Banco Central Europeo ha pedido medidas más ambiciosas contra los desahucios, y que el propio Parlamento Europeo ha alcanzado acuerdos que reclaman a los estados que actúen a favor de los afectados por endeudamientos sobrevenidos.
Por otra parte, Draghi dijo ayer que el BCE vislumbra la recuperación económica en la Unión Europea (UE) a finales de este año y en 2014.
El FMI pide más medidas al BCE contra la crisis
El Fondo Monetario Internacional reclamó ayer a los miembros de la eurozona acciones «concertadas» para impulsar el crecimiento, reducir el desempleo y eliminar la fragmentación financiera, y pidió en concreto al Banco Central Europeo más medidas, como nuevos recortes de tipos o más inyecciones de liquidez, que apoyen la recuperación de la unión monetaria. Por su parte, el presidente del BCE, Mario Draghi (en la imagen), incidió en que el fin de la actual política de la institución está aún «lejano», y reiteró el compromiso de mantener los tipos en sus actuales niveles o más bajos durante un tiempo «prolongado».
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