El Gobierno eleva al 2,3% la previsión del PIB pese al Brexit y la guerra comercial

El Gobierno mantiene su intención de revisar al alza la previsión del PIB para este año, situado hasta ahora en el 2,2%, y lo elevará, como mínimo, una décima más, hasta el 2,3%, algo que ya habían anunciado que se produciría para el próximo cuadro macroeconómico, aunque no habían ofrecido cifras concretas. El crecimiento de la economía española sigue marcando una cifra relativamente alta en comparación con la media de la eurozona, que ronda el 1,3%. La desaceleración económica, la guerra comercial entre EE UU y China –que ha empezado a aminorar las exportaciones–, y el temor a un Brexit duro –hacia el que se encamina Europa irremediablemente– no han hecho mella en las previsiones, que se mantienen al alza, tanto en España como en los organismos internacionales.

A principios de julio, la ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, ya avanzó la intención del Gobierno de mejorar la cifra del PIB, en línea con otras entidades que ya lo habían hecho. La Comisión Europea lo elevó dos décimas, hasta el 2,3%, y previamente el Banco de España subió su estimación hasta el 2,4% y el FMI otras dos, al 2,3%. «Hemos sido prudentes, pero todos los datos nos indican que va a ser así», aseguró ayer la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, que adelantó que ya tiene «bastante avanzado el esqueleto técnico» –en función de la estimación de recaudación– de los Presupuestos Generales del Estado para 2020, aunque pidió «un acuerdo político» para cerrar la toma de posesión de un Gobierno estable. Si se consiguiera este objetivo, Montero confirmó que aún daría tiempo a aprobar las cuentas del próximo año. «Los tiempos estarían muy ajustados, pero todavía sería posible presentarlos». La titular de Hacienda aseguró también que para poder actualizar el cuadro macroeconómico es necesario contar con un Ejecutivo «a pleno rendimiento» y reconoció que estirar la situación actual de un Gobierno en funciones puede ralentizar la marcha de la economía e impedir a su Ministerio presentar un techo de gasto y unos nuevos Presupuestos para el próximo año.

Actualmente, el país sigue bajo las cuentas de 2018, elaboradas en la Presidencia de Mariano Rajoy y auspiciadas por el ex ministro Cristóbal Montoro. Si no hubiera acuerdo político, el 1 de enero se volverán a prorrogar, convirtiéndose en los Presupuestos más longevos de la historia de la democracia.Este ausencia de Presupuestos y la situación del Gobierno en funciones impide transferir a las comunidades autónomas 4.500 millones de euros de las entregas a cuenta y otros 2.500 millones por la liquidación del IVA, una situación que ha provocado las quejas de distintas regiones, que aspiraban a recibir ese dinero para cuadrar parte de sus balances. En relación a estas cantidades todavía pendientes de ejecutar, la ministra Montero indicó que la Abogacía del Estado le ha dado el visto bueno para proceder a actualizarlas aunque no se aprueben los Presupuestos Generales del Estado, pero la actual situación del Ejecutivo, sin capacidad ejecutiva, puede complicar la toma de decisiones. «Técnicamente estamos limitados, por lo que no podemos tomar decisiones. Sólo pido que se quiten las trabas para que el Gobierna pueda funcionar en condiciones».

La ministra negó que esté usando estas entregas a cuenta para presionar a los gobiernos autonómicos y sacar adelante la investidura de Pedro Sánchez que propicie un Gobierno.