El Gobierno presiona a Bruselas para lograr más ayudas tras el bloqueo ruso

El Gobierno anunció ayer que tomará todas las medidas oportunas para minimizar el daño al sector hortofrutícola español del bloqueo ruso a las exportaciones de frutas y hortalizas de la Unión Europea (UE). El Ejecutivo no es partidario de aprobar medidas de represalia por el momento hasta evaluar el impacto «exacto» de las restricciones rusas. Y eso, pese a que España es el tercer país de la UE con más ventas hortofrutícolas a Rusia, el 12,05% del total, tras Lituania y Polonia.

España facturó en 2013 frutas y hortalizas a Rusia por 225,8 millones de euros, según un informe de Asaja. El melocotón y la nectarina, en conjunto, facturaron 68,9 millones de euros; seguidos del tomate, que representa 40 millones, clementinas (21 millones), naranjas (11 millones), limón (11,3 millones), kaki (16 millones) y pepino, con 14,7 millones.

Casi el 15% de las exportaciones totales de melocotón y nectarina españolas tienen como destino la Federación Rusa. España perderá unos 338 millones de euros por el veto de Rusia y se sitúa como el sexto país de la UE más afectado por las sanciones, según datos del Ejecutivo comunitario.

La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, avanzó ayer a la Cadena Cope que el Gobierno se va a volcar en la adopción de las medidas que sean necesarias para frenar el impacto de la decisión de Rusia, entre ellas campañas de promoción y la retirada de 10.000 toneladas de melocotones y nectarinas para su transformación en zumo y entrega a organizaciones benéficas, con el fin de dar estabilidad a los precios, teniendo en cuenta que la campaña ha sido muy buena.

La mayoría de socios europeos perjudicados con la decisión de Moscú descarta las represalias y pide a cambio recibir compensaciones del presupuesto comunitario para el sector por la pérdida del mercado ruso y apuesta por estudiar «posibles compensaciones» más allá de las propuestas para el sector del melocotón y la nectarina, explicaron fuentes europeas consultadas por Efe.

España pretende arrancar mañana un compromiso de la Comisión Europea para utilizar el fondo de gestión de crisis. La Comisión Europea dispone de un fondo de gestión de crisis de 420 millones en 2014 que podría usarse eventualmente para compensar al sector agroalimentario europeo, aunque podría haber «algo más de ayuda» de «otras partidas no utilizadas». Por ahora, el Ejecutivo comunitario considera que «la prioridad» es buscar «mercados alternativos» al ruso para colocar la producción europea.