Autopistas

Fomento ingresará entre 700 y 1.000 millones con las autopistas rescatadas

Adjudicará las nueve infraestructuras de peaje en dos bloques: Madrid y corredor mediterráneo

La R-4 será la primera en volver a manos de Fomento
La R-4 será la primera en volver a manos de Fomentolarazon

Adjudicará las nueve infraestructuras de peaje en dos bloques: Madrid y corredor mediterráneo .

El Ministerio de Fomento ha dado el pistoletazo de salida para devolver al sector privado las nueve autopistas de peajes que tuvieron que ser rescatadas por su mala situación económica. Empezará el próximo mes de febrero y todo hace esperar que concluirá a finales de este mismo año, según fuentes del departamento. Con la licitación de estas autopistas, el estado espera ingresar entre 700 y 1.000 millones de euros, esta última cifra en el mejor de los supuestos posibles. La licitación se llevará a cabo mediante la venta de las nueve autopistas en dos bloques: las radiales de Madrid, la autopistas que la une con Toledo (AP-41) y la que enlaza Ocaña y La Roda (AP-36) por un lado, y las dos del corredor del Mediterráneo (Cartagena-Vera y la circunvalación de Alicante) por otro. En opinión del Ministerio, agrupar las nueve infraestructuras en dos bloques tiene toda la lógica operativa al estar geográficamente situadas en dos zonas muy concretas. Lo que no está decidido es el tipo de contrato que se aplicará en las licitaciones de estos bloques.

diferentes fases

Según informaron ayer fuentes del Ministerio que dirige Íñigo de la Serna, los procesos de liquidación de las nueves autopistas de peajes quebradas se encuentran en fases diferentes. Sólo la R-4, que une Madrid con Ocaña, tiene aprobado el plan de liquidación. En estos momentos se está procediendo a la transmisión de los activos y se espera que pase a ser gestionada por la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (Seittsa) el próximo mes de febrero.

En el otro extremo se encuentra la AP-41 (Madrid-Toledo). Sigue en fase de concurso y aún no se ha fijado fecha para las propuestas de convenio. Lo que sí está claro es que las posturas entre las partes están lo suficientemente distanciadas como para dar por seguro que no habrá acuerdo negociado y que tendrá que ser la autoridad judicial la que acabe aprobando la liquidación, lo que hace imposible prever una fecha concreta, aunque Fomento da por hecho que podría ser licitada dentro de este ejercicio.

Las otras siete autopistas (R-2, R-3, R-5, M-12, AP-36 y las dos del corredor del Mediterráneo) tienen los procesos bastante avanzados, aunque no aprobados, lo que permite pensar a Fomento que pueden pasar a Seittsa en el mes de marzo.

A partir de la fecha de entrada en la empresa estatal se puede empezar a determinar la responsabilidad patrimonial de la administración (RPA) o lo que es igual, el dinero que pagará el Estado a las empresas concesionarias por quedarse con las infraestructuras quebradas. Sobre esta cantidad se centran las mayores discrepancias. El Tribunal de Cuentas la ha cifrado en algo más de 3.700 millones de euros; los fondos a los que los bancos traspasaron la titularidad de las autopistas creen que la cifra podría rondar los 5.000 millones y el Gobierno piensa que no superará por mucho los 2.000 millones.

Lo que sí está muy claro es que el rescate acabará costando más de 1.000 millones de euros a las arcas del Estado y que computará como déficit en las cuentas de este año, algo que tiene menos importancia teniendo en cuenta que España habrá salido del procedimiento de déficit excesivo impuesto por Bruselas si se cumplen las previsiones del Gobierno. Fomento asegura que no afectará al déficit estructural porque se tratará de un único desfase.