Estados Unidos mantiene el nivel de inflación interanual en el 0,8%

El Índice de Precios al Consumo (IPC) de EE UU permaneció estable en julio, después de crecer un 0,2% el mes anterior. De esta manera la inflación se situó en el 0,8% interanual, dos décimas por debajo del dato obtenido el mes anterior, cuando se instaló en el 1%. Según informó ayer el Departamento de Trabajo estadounidense en una nota, este nivel de IPC registrado en julio es el peor desde el mes de febrero, y rompe con una senda alcista de cuatro meses consecutivos, tras elevarse un 0,2% en junio.

Los mayores aumentos de precio, en comparación con julio de 2015, se registraron en las medicinas y la enseñanza, con tasas interanuales del 4% y el 2,8% respectivamente. Los precios de la gasolina, por su parte, retrocedieron un 4,7% debido a la caída en los precios del crudo. El IPC subyacente, que no tiene en cuenta los precios de los alimentos y la energía, tan sólo avanzó un 0,1% en julio, con un aumento interanual del 2,2%.

La Reserva Federal comparte el objetivo de crecimiento de precios por encima del 2% anual, fijada por el Banco Central Europeo, para el buen funcionamiento de la economía.

Reino Unido también divulgó ayer sus datos de inflación del mes de julio. El nivel de precios en el país repuntó el pasado mes hasta el 0,6 %, impulsado, principalmente, por los crecientes precios del transporte, según datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS). Las previsiones de los analistas mantenían invariable el IPC en el 0,5% registrado durante elpasado mes de junio.

En julio, la mayor contribución al alza de los precios correspondió a los combustibles, las bebidas alcohólicas y a los servicios de alojamiento. Además, el descenso en los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas fue menor que el registrado un año antes. También es destacable la subida del 1,6% de los precios de transporte, hasta situarse en el 0,2% anual.

En la nota remitida por el ONS, destacan que éstos datos son los primeros que se ofrecen tras la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea el pasado 23 de junio.