La confianza en la economía global mejora en el primer trimestre de 2012

La confianza en el estado de la economía mundial se recuperó ligeramente en el primer trimestre de 2013, según recoge el índice elaborado por el Foro Económico Mundial, que repuntó desde los 0,38 puntos hasta los 0,43 puntos es una escala de 0 a 1.

Los resultados de la encuesta realizada a 390 expertos se acercan

a posiciones optimistas (por encima de 0,5 puntos) en medio de señales positivas sobre la situación de la eurozona y ante la sensación de que los peores temores sobre el 'abismo fiscal' en Estados Unidos se han disipado.

"El primer dato de 2013 del Indice de Confianza Económica nos da algunos motivos para el optimismo, pero la cifra sigue todavía en terreno negativo. Aún necesitamos un liderazgo dinámico para sacar adelante la economía y superar los desafíos", señaló la directora senior de la Red de Consejos de la Agenda Global del Foro, Martina Gm~r.

En concreto, el número de encuestados con una perspectiva pesimista cayó desde el 56% del trimestre anterior al 43%, mientras que los optimistas aumentaron desde el 17% al 23% y el 34% restante se mantuvo neutral. Tras estos resultados, el dato es el segundo más elevado de los siete trimestres que lleva realizándose la encuesta.

Asimismo, otra prueba de este aumento de la confianza es que los temores a una gran perturbación económica cayeron a los niveles más bajos desde que se comenzó a elaborar el índice, ya que menos de la mitad de los encuestados (48%) creen que un 'shock' financiero era probable en los próximos doce meses, cinco puntos porcentuales menos que el trimestre anterior y 20 puntos menos que hace medio año.

Las otras medidas de confianza contempladas en la encuesta se mantuvieron estables. Así, el porcentaje de encuestados que esperan grandes disturbios sociales, geopolíticos, medioambientales o tecnológicos rondaba el 46%, 50%, 35% y 19%, respectivamente.

Por su parte, las expectativas de la capacidad a nivel mundial para hacer frente a estas amenazas se mantuvo estable, aunque débil, ya que el 51% de los encuestados no confiaban en la gobernanza global y el 45% en la cooperación global.