Expropiaciones en Iberoamérica
La eléctrica valora las empresas en 76 millones de euros
Las cuatro empresas expropiadas por el Gobierno de Bolivia a Iberdrola (dos tenían mero carácter instrumental) representan apenas el 0,2% del negocio del grupo eléctrico que preside Ignacio Galán y contribuyen con alrededor de 6 millones de euros al beneficio total, 2.804 millones de euros el pasado año. La compañía española aseguró ayer que esperará a «estudiar los decretos de expropiación» y confía «en obtener de las autoridades bolivianas el valor real de su participación» en las compañías distribuidoras de energía eléctrica en La Paz y Oruro.
En un plazo de seis meses, una compañía independiente tendrá lista la valoración, aunque fuentes del sector consultadas por este periódico estiman que podría estar en torno a 100 millones de dólares (unos 76 millones de euros).
El hecho de que en el capital de Iberbolivia, la sociedad de cartera que controla las empresas expropiadas, estén presentes dos compañías estadounidenses (General Electric Capital y Mission Funding Epsylon) hace pensar que la medida acordada por el Ejecutivo de Evo Morales no es un ataque directo a intereses españoles.
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