Bruselas

La eurozona cree que el órdago de Nicosia es un farol

La Razón
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La sombra de una convocatoria urgente de los ministros de Finanzas de la eurozona para mañana viernes o el sábado cobra peso cada hora que pasa. El «no» del Parlamento chipriota al plan de rescate diseñado por el Eurogrupo es interpretado como un órdago de la isla a las autoridades comunitarias, que éstas parecen dispuestas a ver. A favor de los países que forman parte de la moneda única pesa el hecho de que la banca de la isla no puede sobrevivir ni siquiera un día sin la ayuda del Banco Central Europeo. Buena prueba de ello es que todas las entidades financieras van a permanecer cerradas hasta el próximo martes. En Bruselas se espera para hoy una propuesta por parte del Gobierno chipriota.

Ayer, los partidos políticos discutían en la sede el Banco Central un plan «B» para fijar cuáles van a ser los sacrificios económicos que van a presentar a la UE para evitar la bancarrota del país.

Europa no está dispuesta a pasar de 10.000 euros en su plan de rescate, porque conceder lo que el país necesita, 17.000 millones, llevaría la deuda hasta el 180% del PIB, lo que haría inviable su recuperación económica. La amenaza de salida de la disciplina del euro parece otra amenaza imposible de llevar a la práctica si no es cambio de una imposición sobre los depósitos elevadísima, que haría perder al país el atractivo que tiene para los inversores extranjeros, que tienen el 40% de los depósitos. ¿Y España, con cuánto contribuiría al rescate? Con alrededor de 900 millones de euros.