Los productos perecederos se pagarán en 30 días

Bruselas quiere unas normas mínimas para proteger a los agricultores y los ganaderos.

La Comisión Europea ha presentado su propuesta para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, especialmente para luchar contra las prácticas comerciales desleales. El objetivo es establecer unas normas mínimas que sean aplicables en toda la UE para suprimir ciertas prácticas abusivas que afectan principalmente al eslabón más débil de la citada cadena, que son los agricultores y ganaderos. La propuesta incluye una breve lista con las que quedarían prohibidas en el conjunto de la UE. Entre ellas figuran el pago más allá de los 30 días en el caso de los productos perecederos, la cancelación a última hora de los pedidos, el cambio unilateral y retroactivo de los términos de un contrato y obligar al proveedor a hacerse cargo de los gastos de los productos perdidos.

En otra lista se recogen una serie de prácticas que también estarían prohibidas a menos que figuren claramente en los contratos entre proveedores y compradores. Por ejemplo, que este último devuelva los productos no vendidos o que cobre por mantener un acuerdo de suministro. Los Estados miembros deberán designar una autoridad pública encargada de hacer cumplir las normas y podrán aplicar sanciones en caso de infracción. Quienes presenten una denuncia podrán pedir confidencialidad y anonimato. El proyecto está en el Parlamento y al Consejo, que tienen que tomar una decisión definitiva. El texto está inspirado, en parte, en la normativa española recogida en la Ley para la Mejora de la Cadena Alimentaria. La propuesta de Bruselas ha tenido, en general, una buena acogida entre las organizaciones agrarias y las cooperativas españolas, salvo en la COAG.