Reino Unido
El AVE británico da la espalda a las constructoras españolas
Las firmas se quedan fuera de la fase del proyecto Londres-Birmingham
Las firmas se quedan fuera de la fase del proyecto Londres-Birmingham.
Revés, y de los grandes, el que se han llevado las constructoras españolas para arrancar la semana. Si la pasada concluyó para el sector con satisfacción por la presentación del plan extraordinario de inversión público-privado de carreteras de 5.000 millones de euros del Ministerio de Fomento, la presente ha arrancado con un mazazo. Ninguna de las compañías que pujaban por el AVE británico que unirá Londres con Manchester –Acciona, ACS Dragados, FCC y Ferrovial– participará en su primera fase de construcción.
La HS2, la entidad que gestiona el proyecto, anunció ayer los consorcios adjudicatarios de la construcción de sus tres primeros tramos, que, con 225 kilómetros de longitud, servirán para unir la capital británica con Birmingham y que cuentan con un presupuesto de 7.500 millones de euros. Al contrario de lo que ocurrió con el proyecto del AVE entre Medina y La Meca, en el que el consorcio español se impuso al francés con una intensa batalla diplomática incluida, esta vez han sido las firmas galas las que han resultado triunfadoras. La zona sur del proyecto ha sido adjudicada al consorcio liderado por la empresa sueca Skanska; la central, al que encabeza la francesa Bouygues Travaux Publics y al que lidera la también francesa Eiffage, y la norte, al conformado por la británica Balfour Beatty y el gigante galo Vinci. Las constructoras españolas tratarán ahora de adjudicarse alguno de los tramos que restan para completar la línea hasta Manchester.
El fracaso de las compañías españolas en la adjudicación se ha producido pese a la acreditada experiencia que tienen en la construcción de líneas de alta velocidad no sólo en España sino en otros países –AVE a La Meca– y su destacada presencia en Reino Unido. Ferrovial ya se había adjudicado contratos previos del proyecto por 1.040 millones. Además, junto con ACS, suma contratos por 2.000 millones de euros en el Crossrail, la nueva línea de cercanías al aeropuerto londinense de Heathrow, de 120 kilómetros de longitud y con un presupuesto de 20.000 millones de euros.
Proyecto en disputa
Ambas compañías, además, han resultado finalistas para la construcción y operación del túnel Silvertown. El proyecto, valorado en unos 1.140 millones de euros al cambio actual, forma parte también del Crossrail y se adjudicará este mismo año. Ferrovial también gestiona Heathrow, el mayor aeropuerto de Europa y uno de los mayores del mundo.
FCC, a través de su división medioambiental, también gestiona varias plantas de residuos en suelo británico.
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