Rosell pide respeto para los sindicatos y le responden con abucheos

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, fue recibido ayer entre fuertes abucheos por parte de los asistentes al X Congreso Confederal de CC OO, lo que requirió la intervención del secretario de organización sindical, Antonio del Campo. Durante el discurso de Rosell, numerosos asistentes abandonaron el auditorio e incluso desde sus gradas se pudieron escuchar frases como: «Vete a ayudar a Bárcenas, chorizo». Haciendo autocrítica, Rosell consideró «necesario, urgente y absolutamente imprescindible» renovar sindicatos y patronal porque no se han adaptado, han sido «demasiado complacientes» y «deberían haberse modernizado mucho antes». Dicho lo cual, criticó las campañas de descalificación que se hace a los sindicatos por «injustas» y afirmó que tiene amigos sindicalistas en los que confía. Aunque no lo parezca, añadió Rosell, «solucionamos muchas cosas concretas», aunque «por responsabilidad no lo expliquen», informa Ep. Subrayó la necesidad de que los agentes sociales deben cambiar y actuar «con transparencia total y absoluta hasta las últimas consecuencias», al tiempo que recalcó que ese cambio no debe ser sólo para patronal y sindicatos, porque «cada euro público debe tener explicación y las cúpulas deben dar ejemplo».

Además, manifestó el «compromiso» tanto de CEOE como de Cepyme por esa transparencia y añadió que sus cuentas están en la web, y que si hay que hacerlo «partida por partida» lo harán porque no quieren esconder «absolutamente nada». En clara defensa a los empresarios, Rosell quiso recordar al auditorio que éstos también quieren combatir la crisis y que han sufrido pérdidas «alarmantes» de puestos de trabajo en los últimos años. Señaló que han caído 250.000 empresas en cinco años, muchos autónomos, y que tras ellos lo han hecho muchos empresarios que han puesto hasta el último momento sus avales y «también hay dramas humanos ahí detrás», añadió, por lo que pidió a los sindicatos que lo tengan en cuenta. Agradeció «muy mucho» la invitación para asistir al acto y, pese a los abucheos, afirmó que sindicatos y empresarios tienen muchas cosas que decirse y que la asistencia a congresos donde están sus representantes «es una prueba de que podemos hablar».