Uber se irá de Barcelona si se aprueba la precontratación

Después de que ayer el director general de la compañía anunciase a primera hora de la mañana su marcha de Barcelona si se imponía la precontratación de sus servicios y después la firma matizase esta posición, Uber ha dejado hoy meridianamente claro que si la Generalitat de Cataluña aprueba este requisito se irá de la Ciudad Condal. Un portavoz de la app ha anunciado en un comunicado que si finalmente el Gobierno catalán impone las precontrataciones, “no podremos seguir prestando nuestro servicio de UberX en Barcelona”.

Desde las doce del mediodía y hasta las seis de la tarde los taxistas barceloneses están votando si aceptan la última propuesta del Ejecutivo catalán para regular el sector de los vehículos de alquiler con conductor (VTC) que utiliza Uber. El Ejecutivo de Quim Torra ha planteado que en el decreto-ley de la Generalitat, que se podría aprobar la semana que viene, seguirá constando la obligación de precontratar los servicios de VTC con una antelación mínima de 15 minutos, pero se habilitará al Área Metropolitana de Barcelona (AMB) para que amplíe el período a una hora, con un mecanismo que no se pueda impugnar.

La reacción de la patronal de los VTC (Unauto) al conocer el decreto-ley fue la de anunciar a última hora de la noche de ayer que estas restricciones suponían “la desaparición de Cataluña del sector de los VTC”. Sin embargo, tanto Uber como Cabify matizaron después que todavía no habían tomado una decisión al respecto. El comunicado de hoy de Uber, sin embargo, no deja lugar a dudas.

La otra gran plataforma de vehículos VTC que opera en España, Cabify, tampoco es demasiado optimista respecto a su futuro en Barcelona. Su fundador, José de Antonio, ha asegurado hoy que aunque todavía no han tomado una decisión, la Generalitat les expulsará de Cataluña si finalmente aprueban la precontratación de sus servicios.

La precontratación se ha convertido en la piedra angular del actual recrudecimiento del conflicto por el transporte urbano de pasajeros. El sector del taxi reclama que los servicios de Uber o Cabify se contraten con varias horas de antelación. De lograr su objetivo, los VTC dejarán de ser, de facto, competencia directa para el taxi, que seguiría gozando de la posibilidad de contratar no sólo servicios similares a los de Uber o Cabify sino también los instantáneos que logra a pie de calle y que constituyen el grueso del negocio.

Si la Generalitat de Cataluña ha cedido finalmente a la exigencia del taxi de la precontratación no ocurre lo mismo con la Comunidad de Madrid. El Gobierno de Ángel Garrido se niega a imponer tal requisito y asegura que serían los ayuntamientos los competentes para hacerlo, tal y como ha reflejado en la reforma exprés que ha presentado al sector. "Nuestro borador está hecho, abierto a matices, a otras incorporaciones salvo un asunto, la precontratación", ha declarado hoy mismo Garrido. La patronal madrileña (Ceim), que ha tratado de mediar entre las dos partes, ha hecho llegar a Garrido una propuesta para establecer 30 minutos de precontratación que fueran ampliables a una hora por los ayuntamientos, además de pedir que los VTC no puedan aparcar en superficie ni circular más de treinta minutos en vacío. Pero el Gobierno regional ha rechazado la propuesta, según Fedetaxi. La principal asociación del sector del taxi a nivel nacional ha asegurado que, ante esta negativa, seguirán luchando y que si Fitur está colapsado es por responsabilidad de Garrido y también de “Pedro Sánchez y José Luis Ábalos, que han provocado todo esto”.