Un aeropuerto a precio de saldo

MADRID- El aeropuerto fantasma de Ciudad Real, con una de las pistas más largas de Europa, salió ayer a subasta por diez veces menos de lo que costó. La administración concursal de la sociedad propietaria, en concurso de acreedores desde hace tres años y medio, abrió ayer el plazo para recibir ofertas de compra por el faraónico aeródromo con un precio mínimo de salida de 100 millones de euros pese a que se invirtieron más de 1.100 millones en levantarlo. El plazo de la primera fase de venta directa al mejor postor se cerrará a las 15:00 horas del viernes 27, periodo en el que los compradores interesados podrán presentar sus ofertas de compra del Aeropuerto Central y su zona de uso industrial en cualquiera de las tres configuraciones contempladas en dicho plan.

La administración concursal admitirá sólo ofertas de compra formuladas en firme y en las que se ofrezca un precio neto de, al menos, cien millones de euros, sin límite superior en el importe a pagar. Los interesados deberán presentar un aval económico del 5% del total ofrecido, bien en efectivo o a través de una entidad bancaria o aseguradora.

Si al cierre del plazo de la primera fase el aeropuerto no se hubiera vendido, se abrirá la segunda mediante venta en subasta pública privada, momento en el que el precio de la infraestructura aeroportuaria quedará fijado entre 80 y 100 millones, también con la exigencia de la constitución de un depósito.

La megainfraestructura fue financiada en su mayor parte por la Administración regional, principalmente a través de Caja Castilla-La Mancha, la primera entidad que necesitó ser rescatada por el Banco de España.

El proyecto fue justificado en gran medida como una ayuda a la congestión del aeropuerto de Barajas en Madrid (situado a 235 kilómetros).

En la idea original se contaba con la construcción de una estación de AVE dentro del recinto, destinada a llevar rápidamente a los pasajeros desde y hacia la capital. Pero se agotaron los fondos antes de que se hiciera efectivo. El aeropuerto estaba proyectado para gestionar 2,5 millones de viajeros al año. En los casi tres años que permaneció abierto, tanto para vuelos comerciales como privados, pasaron por él algo más de 100.000 pasajeros, por lo que se ha demostrado que las proyecciones para una población de 74.000 habitantes, como es el caso de Ciudad Real, fueron poco realistas.

Realizó su primer vuelo comercial en el mes de diciembre de 2008 y echó el cierre el primer semestre de 2011. La inauguración prevista dos meses antes tuvo que ser cancelada porque la infraestructura no cumplió a tiempo con las medidas exigidas por el Ministerio de Medio Ambiente que habían sido acordadas con la Unión Europea.

Cuenta con una pista de 4.000 metros y una terminal de pasajeros de 28.000 metros cuadrados con capacidad para cinco millones de viajeros.