Tecnología
Una mirada diferente al futuro del sector turístico
Nuestra mirada diferente empieza en el modo de cómo tratamos de anticipar el futuro
Nuestra mirada diferente empieza en el modo de cómo tratamos de anticipar el futuro. La sociedad del conocimiento en la que vivimos está caracterizada por un exceso tal de información que nos resulta complicado identificar qué información es relevante para una situación absolutamente trascendental: el cambio de época de los actuales modelos de negocio en la que estamos inmersos. Por ello, es necesario poner énfasis, no tanto en identificar qué sucede ni cómo está sucediendo, sino en comprender por qué está sucediendo y qué impacto pueden tener esos cambios estructurales en el modelo de negocio futuro del turismo respecto al actual. La clave de la competitividad futura reside en la anticipación en el presente de todo aquello que sucede en el entorno contextual donde conviven e interactúan todos los sectores económicos.
De este modo, obtenemos dos conclusiones relevantes cuando investigamos en ese entorno contextual. La primera es que hoy convivimos cinco generaciones de consumidores muy diferentes entre sí («Generación Silenciosa», «Baby boommers», «Generación X», «Millennials» y «Generación Z»), existiendo un gap generacional entre las generaciones analógicas y las digitales. Este hecho es absolutamente crítico, pues el comportamiento delas dos generaciones más jóvenes (Millennials y Gen Z) serán determinantes en ese modelo de negocio futuro, ya que se estima que tendrán el 45% de la renta disponible en 2025.
La segunda de las conclusiones es que la Tecnología 4.0 es un acelerador de los cambios, al posibilitar nuevas soluciones a problemas de la sociedad y con unas generaciones (las más jóvenes) especialmente predispuestas a asumirlas.
Ahora bien, en este contexto de cambio generacional y predominio de lo tecnológico, es posible identificar seis tendencias de innovación en el sector turístico, que a pesar de que detectamos que no se dan de manera integrada, a nosotros nos gusta explicarlas de manera conectada puesto que nos permite anticipar cómo será el modelo de negocio del turismo en el futuro.
En primer lugar, identificamos un conjunto de innovaciones que giran en torno a la identidad de los usuarios de los productos turísticos («Personal Identity»). Esta tendencia pone el foco en innovaciones relacionadas con los diferentes estilos de vida y modos de relación de los usuarios con sus colectivos de referencia.
En segundo lugar, surgen dos tendencias («Living Experience y Bleisure») que abordan uno de los aspectos claves para conectar con las nuevas generaciones: las experiencias tanto en la esfera personal como en la laboral. En la esfera personal, las innovaciones que hemos identificado se centran en generar experiencias vinculadas con la singularidad del entorno, el desarrollo personal y el compartir esas experiencias. Mientras que en la esfera profesional, la generación de experiencias se centra en facilitar la autogestión personalizada por parte del trabajador y el aumento de la productividad a la vez que el disfrute de experiencias exclusivas.
Pero esta oferta de experiencias debe ser hecha realidad. Así pues, surge una tendencia que hemos denominado «User Tech Experience» que, mediante el uso de la tecnología 4.0. (IA, Robótica, Big Data, IoT, Blockchain ...), introduce innovaciones que tratan de maximizar la experiencia de usuario a lo largo de todo su «Costumer Journey», reduciendo sus esfuerzos, personalizando la experiencia y facilitando la recomendación posterior.
Finalmente, aparecen dos tendencias: «Sustainable Tourism» y «Low Cost Chic». La primera hace referencia a innovaciones relacionadas con la Responsabilidad Social Corporativa, que incluye el respeto hacia los aspectos del entorno cultural, desarrollo local, sostenibilidad y ecología de los alojamientos. La segunda trata de hacer económicamente accesible a una gran mayoría de la población todo el valor generado, de este modo surgen innovaciones que permiten una compra inteligente, potencian la economía colaborativa al mismo tiempo que posibilitan al empresario turístico alcanzar una mayor eficiencia en costes. Ahora bien, ese modelo del negocio del turismo del futuro se da en un contexto caracterizado por una tremenda transformación e innovación, que permite generar nuevas oportunidades de negocio. Veámoslo con un ejemplo. Imaginemos un turista que visita nuestra ciudad y que tiene un marcado comportamiento de respeto medioambiental. Este turista al llegar al aeropuerto, se dirige al hotel, utilizando una app de movilidad («mobility as a service») que le ha facilitado el hotel, permitiéndole combinar y pagar diferentes medios de transporte público/privados. Al llegar al hotel, decide hacer un poco de «running» por la ciudad, para lo cual el hotel le tiene preparado en su habitación unas zapatillas de deporte «sostenibles», hechas con biomasa procedente de algas de río. A su vuelta, cansado, prefiere comer en su habitación, y utilizando una app, que combina inteligencia artificial y «machine learning», pide una comida adaptada a su perfil nutricional, la cual incluye una hamburguesa, con gusto y apariencia de carne que, sin embargo, está hecha a partir de plantas (en cuya producción se ha contaminado menos y utilizado menos agua y tierra que la hecha con carne). Pero además, se la traen a la puerta de la habitación con un repartidor que la ha recogido con un dron. Finalmente, al día siguiente, baja al restaurante y come un plato vegano elaborado con verduras directamente cogidas del huerto vertical hidropónico instalado en el mismo restaurante del hotel.
Este caso no es ciencia ficción. Las innovaciones que hemos relatado, y otras muchas, son innovaciones reales que están ocurriendo en sectores adyacentes al sector del turismo, como son el de la movilidad, moda, alimentación, salud, agricultura,...
El sector del turismo no está solo. La mirada diferente que proponemos es precisamente tener en cuenta todo lo que nos rodea y aprovecharnos del torrente de innovaciones en la que todos los sectores están inmersos, para con ello generar un futuro nuevo modelo de negocio turístico mucho más diferencial y sostenible.
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