Editorial

Hay alternativa a un gobierno superado

Llegará la oportunidad de que los españoles hablen. Hay una alternativa seria y capaz que entendemos representa el presidente popular

Nos referíamos en estas páginas editoriales al balance sombrío de la acción de gobierno de la coalición en el poder. Definitivamente, y a pesar de que la vicepresidenta Yolanda Díaz se haya autoadjudicado la dignidad de integrar el mejor gabinete de la historia de la democracia, la convención, compartida por una amplia mayoría de la opinión pública, conforme a las últimas encuestas, es que no nos podemos sentir afortunados con socialistas y comunistas. Hemos defendido abierta y repetidamente que la nación necesita de manera inaplazable un cambio político, aunque lamentablemente Pedro Sánchez no tenga intención de dar la voz al pueblo por el temor a que su continuidad en la magistratura se precipite. Probablemente, vetar a la soberanía popular en los mecanismos de decisión de la democracia sea una necesidad si lo que priman son los intereses y el futuro del presidente y sus socios. La herencia será seguramente la más adversa de todos los traspasos de poder entre administraciones de distinto signo en este periodo de libertad que camina hacia su quinta década. Hay que reconocer a Alberto Núñez Feijóo que desde su llegada al liderazgo de la oposición haya planteado su labor de control al Gobierno como un ejercicio constructivo y propositivo y no únicamente crítico. En estos meses de Presidencia del PP, ha formulado todo un catálogo normativo convertido en un auténtico programa con que afrontar los problemas reales del país. Moncloa ha despachado con soberbia, displicencia y torpeza iniciativas que ha adoptado después, aunque de forma insuficiente o singular, como ha ocurrido con medidas clave de los paquetes anticrisis como la bajada del IVA de la luz, el gas y los productos básicos. En su balance del año, Núñez Feijóo, que demuestra en cada una de sus comparecencias el poso y la experiencia como gestor de éxito avalado por cuatro mayorías absolutas, expuso el desatino que supone que el cheque a las familias vulnerables para la compra sea la mitad que el bono de ocio para jóvenes, que se ponga en suma el futuro de los hogares al servicio de la propaganda. El deterioro de las instituciones con la colonización de las mismas ha sido una marca de Pedro Sánchez que habrá que reconducir. El plan de «calidad institucional» para superar la política «de bloques» y que los organismos estén al servicio de la gente, comprometido por el líder del PP, parece ineludible en una dinámica regeneracionista imprescindible. Núñez Feijóo explicitó que «2023 es una oportunidad para el cambio, y yo vengo a ofrecerlo». Y sí, los próximos doce meses serán cruciales, con la ocasión de poner fin a las políticas corrosivas de un gobierno superado que ha degradado la democracia. Llegará la oportunidad de que los españoles hablen. Hay una alternativa seria y capaz que entendemos representa el presidente popular.