Educación

La educación en tiempos de coronavirus

Tranquilidad y mucha organización en casa, que sea diferente no significa que sea peor, y hay infinidad de actividades beneficiosas para los niños.

Tranquilidad y mucha organización en casa, que sea diferente no significa que sea peor, y hay infinidad de actividades beneficiosas para los niños.
Tranquilidad y mucha organización en casa, que sea diferente no significa que sea peor, y hay infinidad de actividades beneficiosas para los niños.Pixabay

Compaginar el confinamiento con el teletrabajo y los deberes de los hijos no es tarea fácil. Durante estos días, las redes sociales están invadidas de mensajes de padres que comparten dudas sobre la educación de sus hijos y otros que ofrecen su experiencia para ayudar a los demás. Muchas familias se preguntan ¿influirá esta situación en la educación de mis hijos? “Debemos entender que estamos en una situación excepcional y si la aprovechamos bien podemos salir reforzados. Tenemos tiempo para hacer muchas cosas que antes no podíamos y hay que aprovechar esas oportunidades para la educación de nuestros hijos”, afirma Pilu Hernández Dopico maestra y CEO de El Pupitre de Pilu.

Se está debatiendo si es importante que los niños cumplan el mismo horario del colegio en casa para no perder el hábito, “pero no es realista, ya que los padres no tienen tiempo para supervisar los deberes de sus hijos porque la mayoría están teletrabajando”. Por ello, la experta recomienda que los más pequeños dediquen 45 minutos o 1 hora por la mañana y otra por la tarde, para hacer los deberes. “El resto del tiempo podemos concienciar a los niños/as de sus responsabilidades y de disfrutar el tiempo en familia”.

¿Qué tipo de actividades podemos realizar? ¿Cómo organizamos las distintas materias? ¿Qué deberían hacer los centros? Son algunas de las preguntas que les surgen a padres y madres, y que el profesorado está intentando resolver de manera urgente. Por ello, Pilu ofrece varias recomendaciones dependiendo de la edad de los niños/as:

· Los niños de infantil (de 3 a 5 años) no deberían tener tareas escolares más que la educación del día a día como puede ser: recoger sus juguetes, ayudar a poner la mesa, trabajar el lenguaje oral, fomentar la lectura, afianzar la motricidad fina y gruesa, ayudar a hacer la merienda…etc.

· Los niños de primaria (1 EP a 1 ESO) deberán dedicar tiempo a sus deberes escolares y realizar actividades como: comics, reloj digital, listening de inglés, cálculo etc. La maestra recomienda que los niños hagan una hoja de deberes por día que recoja una actividad de cada materia. La intención es no saturar a los niños pero que dediquen tiempo a repasar contenidos que han trabajado en clase sin ayuda de sus padres. Con respecto a las tareas del hogar, se acumula lo anteriormente dicho y también ayudar a limpiar la casa, poner la lavadora y lavavajillas, ayudar a hacer la comida etc.

· Los niños de la ESO (2 ESO en adelante) debemos tratarle como adultos. Es importante fomentar los hábitos culturales como la lectura, visitas virtuales a museo, etc. Incluso al tener materias con más contenido pueden dedicarles más tiempo a los deberes escolares para evitar también el uso en exceso de las tecnologías. Con respecto a las tareas del hogar, es importante que ayuden en la mayoría de ellas, desde hacer sus habitaciones, ayudar a cocinar, y en el caso de tener hermanos más pequeños ayudarles en sus tareas.

Ante la crisis sanitaria y el cierre de las aulas, los centros se han visto obligados a impartir la enseñanza online. Estas clases son productivas, pero para muchos puede llegar a ser un problema. “Es bueno que los niños estén en constante aprendizaje, pero no es justo impartir nuevos conocimientos a través de internet porque hay muchas familias que no tienen acceso, por lo que es más equitativo repasar e incidir sobre lo aprendido”. Para ello, Pilu Hernández Dopico propone dos alternativas: En primer lugar, hacerles llegar a las familias las tareas por correo ordinario semanalmente o, en segundo lugar, facilitar el acceso a internet a estas familias para que los alumnos puedan llevar a cabo las tareas como el resto de sus compañeros.

La vida de los colegios e institutos ha desaparecido de un día para otro y no estamos acostumbrados a dar todas las clases vía online. “Las administraciones deben entender que estamos en una situación excepcional y no podemos pedirles a las familias que se adapten de inmediato a una nueva programación porque cada uno tiene su situación personal”. Actualmente los maestros están 24 horas corrigiendo el material de los alumnos y los padres saturados en casa, es importante tener una organización y facilitarnos el trabajo entre todos.

Para concluir, la maestra recomienda “Tranquilidad y mucha organización en casa, que sea diferente no significa que sea peor, y hay infinidad de actividades beneficiosas para los niños”.Compaginar el confinamiento con el teletrabajo y los deberes de los hijos no es tarea fácil. Durante estos días, las redes sociales están invadidas de mensajes de padres que comparten dudas sobre la educación de sus hijos y otros que ofrecen su experiencia para ayudar a los demás. Muchas familias se preguntan ¿influirá esta situación en la educación de mis hijos? “Debemos entender que estamos en una situación excepcional y si la aprovechamos bien podemos salir reforzados. Tenemos tiempo para hacer muchas cosas que antes no podíamos y hay que aprovechar esas oportunidades para la educación de nuestros hijos”, afirma Pilu Hernández Dopico maestra y CEO de El Pupitre de Pilu.

Se está debatiendo si es importante que los niños cumplan el mismo horario del colegio en casa para no perder el hábito, “pero no es realista, ya que los padres no tienen tiempo para supervisar los deberes de sus hijos porque la mayoría están teletrabajando”. Por ello, la experta recomienda que los más pequeños dediquen 45 minutos o 1 hora por la mañana y otra por la tarde, para hacer los deberes. “El resto del tiempo podemos concienciar a los niños/as de sus responsabilidades y de disfrutar el tiempo en familia”.

¿Qué tipo de actividades podemos realizar? ¿Cómo organizamos las distintas materias? ¿Qué deberían hacer los centros? Son algunas de las preguntas que les surgen a padres y madres, y que el profesorado está intentando resolver de manera urgente. Por ello, Pilu ofrece varias recomendaciones dependiendo de la edad de los niños/as:

· Los niños de infantil (de 3 a 5 años) no deberían tener tareas escolares más que la educación del día a día como puede ser: recoger sus juguetes, ayudar a poner la mesa, trabajar el lenguaje oral, fomentar la lectura, afianzar la motricidad fina y gruesa, ayudar a hacer la merienda…etc.

· Los niños de primaria (1 EP a 1 ESO) deberán dedicar tiempo a sus deberes escolares y realizar actividades como: cómics, reloj digital, listening de inglés, cálculo etc. La maestra recomienda que los niños hagan una hoja de deberes por día que recoja una actividad de cada materia. La intención es no saturar a los niños pero que dediquen tiempo a repasar contenidos que han trabajado en clase sin ayuda de sus padres. Con respecto a las tareas del hogar, se acumula lo anteriormente dicho y también ayudar a limpiar la casa, poner la lavadora y lavavajillas, ayudar a hacer la comida etc.

· Los niños de la ESO (2 ESO en adelante) debemos tratarlos como adultos. Es importante fomentar los hábitos culturales como la lectura, visitas virtuales a museo, etc. Incluso al tener materias con más contenido pueden dedicarles más tiempo a los deberes escolares para evitar también el uso en exceso de las tecnologías. Con respecto a las tareas del hogar, es importante que ayuden en la mayoría de ellas, desde hacer sus habitaciones, ayudar a cocinar, y en el caso de tener hermanos más pequeños ayudarles en sus tareas.

Ante la crisis sanitaria y el cierre de las aulas, los centros se han visto obligados a impartir la enseñanza online. Estas clases son productivas, pero para muchos puede llegar a ser un problema. “Es bueno que los niños estén en constante aprendizaje, pero no es justo impartir nuevos conocimientos a través de internet porque hay muchas familias que no tienen acceso, por lo que es más equitativo repasar e incidir sobre lo aprendido”. Para ello, Pilu Hernández Dopico propone dos alternativas: En primer lugar, hacerles llegar a las familias las tareas por correo ordinario semanalmente o, en segundo lugar, facilitar el acceso a internet a estas familias para que los alumnos puedan llevar a cabo las tareas como el resto de sus compañeros.

La vida de los colegios e institutos ha desaparecido de un día para otro y no estamos acostumbrados a dar todas las clases vía online. “Las administraciones deben entender que estamos en una situación excepcional y no podemos pedirles a las familias que se adapten de inmediato a una nueva programación porque cada uno tiene su situación personal”. Actualmente los maestros están 24 horas corrigiendo el material de los alumnos y los padres saturados en casa, es importante tener una organización y facilitarnos el trabajo entre todos.

Para concluir, la maestra recomienda “Tranquilidad y mucha organización en casa, que sea diferente no significa que sea peor, y hay infinidad de actividades beneficiosas para los niños”.