Casa Real

El debut de Amalia de Holanda en la visita oficial de los Reyes confirma su "romance" con España

La joven lleva la insignia de la Gran Cruz de Isabel la Católica que le concedió el Rey

ÁMSTERDAM (PAÍSES BAJOS), 17/04/2024.- La princesa heredera de Países Bajos, Catalina Amalia de Orange, durante la cena de gala con motivo de la visita de Estado de los reyes de España al país, este miércoles en Ámsterdam (Países Bajos). EFE/ Chema Moya
Felipe VI y Letizia realizan una visita de Estado a Países BajosChema MoyaAgencia EFE

La primogénita de los reyes Guillermo Alejandro y Máxima de los Países Bajos, Amalia de Orange, ha debutado por primera vez en una cena de gala en el Palacio Real de Ámsterdam. Lo ha hecho durante la cena que esta noche han ofrecido sus padres a Don Felipe y Doña Letizia. La joven, de 20 años, ha posado en la foto oficial junto a los Reyes, además de sus padres, la princesa Beatriz y la princesa Margarita.

Su debut ha despertado una gran expectación. La elección de España para estrenarse en un acto de esta magnitud confirma la estrecha relación entre ambas casas reales. De hecho, Amalia de Orange vistió una banda amarilla y la insignia de la Gran Cruz de Isabel la Católica. El rey Felipe VI aprobó concederle esta condecoración como muestra de su "Real aprecio".

La vida de la joven, de 20 años, no está siendo fácil. Hay que recordar que el crimen organizado se convirtió en un grave problema de seguridad pública en los Países Bajos, y la mafia extendió sus amenazas incluso a la princesa. Con el fin de garantizar su integridad, se decidió que abandonara el piso de estudiantes que compartía en el centro de Ámsterdam para regresar a palacio. En este sentido, el rey Guillermo Alejandro reveló ayer durante el discurso en la cena de gala la estancia de su hija mayor, de 20 años, que se mantuvo en secreto con la complicidad de los reyes Felipe y Letizia, quienes tienen una estrecha amistad con el monarca neerlandés y su esposa, Máxima. “Todo ello fue posible gracias a la afectuosa dedicación de un gran número de conciudadanos y de sus majestades. Fue una conmovedora prueba de amistad en un periodo difícil. Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a sus majestades y a todos los que colaboraron en ese esfuerzo”, subrayó el monarca neerlandés en su discurso en la cena de gala ofrecida a los reyes de España en el Palacio Real de Ámsterdam. Durante el tiempo que estuvo en Madrid, la heredera de la Corona neerlandesa pudo seguir a distancia sus estudios universitarios.

La heredera es una enamorada de nuestro país. En este sentido se le ha visto en varias ocasiones por la capital paseando por el Retiro o de tiendas de la capital. De hecho, la joven habla perfectamente español debido a los orígenes argentinos de su madre, la Reina Máxima.