La yihadista detenida viajaba a Siria para casarse con un terrorista

Había ocultado su radicalización: vestía de occidental para no levantar sospechas.

Por amor. La presunta yihadista detenida por la Guardia Civil en el aeropuerto de Barajas (Madrid) en la noche del pasadp lunes cuando pretendía viajar a Siria vía Turquía, se había enamorado de un miembro del Estado Islámico, el DAESH, de nacionalidad egipcia con el que pretendía casarse, según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas.

Durante las constantes consultas a páginas islamistas, la arrestada entró en un foro en el que estableció contacto con el ciudadano egipcio, con el que empezó intercambiando ideas sobre el yihadismo y después en temas personales, hasta el punto de enamorarse de él.

No es el primer caso, ni será el último, por la fascinación que los combatientes del DAESH causan entre mujeres de escasa formación que, además de ser captadas para la «guerra santa», terminan enamorándose de algunos de los «moujahidines» (soldados) con los que entran en contacto.

El proceso de radicalización de la mujer de Huelva había durado menos de un año y lo había ocultado en su casa, de la que salía vestida de occidental para después vestirse con el atuendo islamista.

Los aeropuertos forman parte de uno de los factores que incrementan la amenaza contra nuestro país por el hecho de que determinados aeródromos españoles estén siendo utilizados como lugares desde donde parten los combatientes que pretenden incorporarse a la yihad en Siria o en Irak.

A este respecto, se cita el aeropuerto de Barcelona, porque desde él han partido no sólo yihadistas radicados en España, sino también muchos de los que se encontraban residiendo en Francia. Incluso el de Málaga, desde donde partieron yihadistas radicados en Marruecos.

En la operación de arresto realizada en Barajas, han intervenido diferentes unidades de la Comandancia de Huelva y de la Jefatura de Información de la Guardia Civil, bajo la dirección el Juzgado Central de Instrucción nº 1 y la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Los investigadores de la Guardia Civil habían sabido de la presunta relación con actividades de terrorismo yihadista. Y que tenía pensado viajar a Turquía y después trasladarse a Siria para integrarse en las filas de DAESH.

La detenida, una ciudadana española de 22 años de edad y con residencia en la provincia de Huelva, había experimentado un proceso de conversión al islam más extremista y presuntamente mantenía contacto a través de internet con elementos radicales, según apuntan fuentes de la investigación.

Las pesquisas forman parte de las gestiones que la Guardia Civil sigue sobre las vinculaciones y comunicaciones que el grupo terrorista DAESH mantiene con residentes. Gracias a ello, en los últimos años se ha permitido detectar los planes que la detenida tenía para desplazarse.

«La monitorización e investigación de este tipo de conexiones, añaden las mismas fuentes, es vital para la lucha contra el terrorismo yihadista, puesto que no sólo permiten impedir el crecimiento del flujo de personas que se enrolan en organizaciones terroristas –DAESH en este caso–, sino que posibilitan conocer las consignas e instrucciones que desde el núcleo de los grupos terroristas se envían a sus seguidores en Occidente y detectar eventuales planes de ejecución de acciones terroristas».