Política

Crisis económica

Draghi pide al Gobierno que persevere en las reformas «incluso si a corto plazo el coste para los ciudadanos es considerable»

Prima de riesgo
Prima de riesgolarazon

El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, se

mantuvo ayer en su línea de defensa de las políticas de ajuste, pese a

si ello implica esfuerzos por parte de la sociedad. Así,pidió al

Gobierno español que persevere en las reformas estructurales y las

políticas de consolidación presupuestaria «incluso si a corto plazo el

coste para los ciudadanos es considerable».

Ante la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo, el

banquero aseguró que «las cosas están progresando en España y en todos

los demás países sometidos a estrés» y, en este sentido, pidó al

Ejecutivo que dirige Mariano Rajoy que «persevere» en las reformas

durante el año 2013 porque son «el camino correcto» para recuperar la

competitividad.

Aunque los datos de crecimiento de España revelan una caída del

crecimiento este año de 1,5%, Draghi destacó que los efectos de los

ajustes son visibles. En este sentido, recordó que las exportaciones

de bienes y servicios han aumentado un 27% en volumen en España desde

2009, un 14% en Irlanda, un 22% en Portugal y un 21% en Italia. «Estos

cuatro países están experimentando además mejoras en los costes

laborales unitarios», celebró.

«Las reformas económicas dan sus frutos, incluso si a corto plazo el

coste para los ciudadanos puede ser y es considerable. Pero las

reformas son el camino correcto. Los Gobiernos deben perseverar",

planteó el presidente del BCE.

En este sentido, explicó que el próximo año las prioridades se centran

por una parte en mantener las políticas de consolidación fiscal y los

problemas que afectan a la competitividad. En el primer apartado, se

mostró favorable a desarrollos los denominados «contratos bilaterales»

entre los Estados miembros y las instituciones donde se especifiquen

las reformas pendientes a cambio de poder participar a los

instrumentos de solidaridad de los que se ha dotado la UE.

Incluso aplaudió la idea surgida en la cumbre de Bruselas de la semana

pasada, donde se acuñó el término de «mecanismos de solidaridad», o

«apoyo financiero temporal», como lo denominó Draghi que ayudaría a

los Estados en crisis.

En materia de competitividad, recalcó la importancia de erradicar las

barreras que aún persisten en el mercado interior de bienes y

servicios, así como las rigideces del mercado laboral para «adaptarse

a las exigencias del mercado mundial y mantener un alto nivel de

empleo».

Por otra parte, Draghi también se pronunció sobre la falta de crédito a la economía real, y se mostró convencido de que sus esfuerzos en la política monetaria –con sus programas de barra libre y bajada de tipos– se acabarán trasladando a la economía.