Política

Asturias

El espontáneo beso de la Reina

La Razón
La RazónLa Razón

En los actos institucionales la rigidez del protocolo sorprende con gestos que llaman la atención, ya que se salen completamente del guión. Es en esos momentos en los que los miembros de la Familia Real se permiten escenificar comportamientos espontáneos que transmiten cercanía. Fue el caso ayer durante la recepción a los Reyes de Holanda en el Palacio de la Zarzuela, por su visita oficial a nuestro país. Mientras los Príncipes de Asturias «traían» a los invitados reales desde la base de Torrejón de Ardoz, los anfitriones, es decir, los Reyes, acompañados por la Infanta Elena, esperaban en la puerta de Zarzuela. La hija mayor del Jefe de Estado fue la primera en llegar, y después salieron del interior del Palacio Don Juan Carlos y Doña Sofía. Cuando aparecieron, Doña Elena procedió a saludar primero a su padre y después a su madre. Después de saludar a su hija, la Reina se giró a comentarle algo a Don Juan Carlos y, tras una breve conversación, Doña Sofía sorprendió a la concurrencia con un inesperado beso en la mejilla del Monarca.

Unos minutos más tarde, Don Felipe aparcó el coche en la entrada y tanto Guillermo Alejandro como Máxima se dirigieron a saludar a los Reyes de España, seguidos por los herederos al Trono español. La Reina holandesa se colocó al lado de Doña Elena, y durante el posado ambas intercambiaron unas expresivas y alegres confidencias. Después, todos pasaron dentro para almorzar antes de que continuara la visita.