Política

Melilla

El exmilitar español de la célula estuvo tres años en el Ejército y fue juzgado por abandono de destino

El exmilitar español que supuestamente pertenece a la célula terrorista que ha sido desarticulada en Melilla estuvo tres años en el Ejército y fue juzgado por abandono de destino, según han informado fuentes del Ministerio de Defensa.

En concreto, la red yihadista desmantelada la pasada madrugada había enviado al menos a 26 yihadistas, 24 de ellos marroquíes y dos españoles, a los grupos terroristas de Al Qaeda en el Sahel. Uno de los españoles es Zakaria Said Mohamed, un exmilitar profesional que se encontraría actualmente en Malí realizando labores de adiestramiento operativo sobre explosivos y manejo de armas.

Las citadas fuentes han explicado que Mohamed formó parte de las filas del Ejército de Tierra español entre los años 2007 y 2010, concretamente en un regimiento de ingenieros. El año de su salida, fue juzgado por abandono de destino, si bien no cumplió la condena porque causó baja antes.

Mientras que el exmilitar no ha regresado a España y su paradero actual se sitúa en Malí, el otro español, Benaissa Laghmouchi Baghdadi, volvió tras ser formado en un campo de entrenamiento del rupo terrorista MUJAO en el desierto del norte de Malí. Así pues, es el primer yihadista español retornado de dicha zona en conflicto y su misión era captar nuevos combatientes.

La operación policial desarrollada la pasada madrugada, en la que se ha detenido a seis personas, se considera un importante golpe contra las redes de captación y envío de yihadistas hacia organizaciones terroristas desplegadas en zonas del Sahel, algunas de las cuales son responsables de la comisión de crímenes de guerra como asesinatos de población civil o secuestros de personal extranjero dedicado a la ayuda humanitaria. Este fue el caso de los dos cooperantes españoles capturados por el grupo terrorista MUJAO el 23 de octubre de 2011, que fueron liberados en Malí en julio de 2012.

La operación policial se considera un importante golpe contra las redes de captación y envío de yihadistas hacia organizaciones terroristas desplegadas en zonas del Sahel, algunas de las cuales son responsables de la comisión de crímenes de guerra como asesinatos de población civil o secuestros de personal extranjero dedicado a la ayuda humanitaria. Este fue el caso de los dos cooperantes españoles capturados por el grupo terrorista MUJAO el 23 de octubre de 2011, que fueron liberados en Mali en julio de 2012.

Con la detención hoy de seis personas --todas de nacionalidad española-- y ocho registros domiciliarios, las fuerzas de seguridad dan por finalizada la operación antiterrorista desarrollada en Melilla contra una red internacional dedicada a la captación y envío de yihadistas para su integración en organizaciones terroristas asentadas en Mali y Libia.

Los detenidos, todos residentes en Melilla, son: Mustafa Al Lal Mohamed (42 años), Kamal Mohamed Driss (32), Benaissa Laghmouchi Baghdadi (42), Mohamed Mohamed Benali (26), Mustafa Zizaqui Mohand (que precisamente este viernes cumple 26) y Rachid Abdel Nahet Hamed (37).

Esta operación policial ha estado dirigida y supervisada por el Juzgado Central de Instrucción número 4 y la Fiscal Coordinadora de Terrorismo Yihadista de la Audiencia Nacional.

Los investigadores han verificado que los yihadistas enviados se habrían unido a las facciones de Al Qaeda en la zona del Sahel, concretamente en la organización terrorista Movimiento para la Unicidad y la Yihad en Africa Occidental (MUJAO), en la que estos 'combatientes', o bien se habrían integrado plenamente como dirigentes y activos partícipes en atentados y ejecuciones públicas, o habrían fallecido en el transcurso de operaciones terroristas.

La red desmantelada había establecido una importante vía de apoyo en Melilla y Nador (Marruecos), donde un grupo de personas realizaba tareas de captación, adoctrinamiento, financiación, además de facilitar los medios necesarios para el traslado de los yihadistas a los destinos concertados. Este grupo de apoyo fue parcialmente desarticulado en Marruecos a finales del 2012, con la detención de veintinueve de sus miembros. Entre los seis detenidos en la operación desarrollada por agentes de la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía y del Servicio de Información de la Guardia Civil, se encuentran también los responsables y dinamizadores de las diferentes plataformas mediáticas de 'Sharia4Spain', una de las ramas del 'Movimiento Global Sharia4', organización radicada principalmente en Internet y que cuenta con una extensa estructura internacional en forma de franquicias nacionales en un gran número de países.

Estas franquicias nacionales cuentan con una amplia presencia en Internet, utilizando 'la red' como herramienta para distribuir abundantes cantidades de material de signo yihadista, orientado a ejercer una manifiesta radicalización, captación y enaltecimiento de destacadas conductas terroristas.

El grupo originario del 'Movimiento Global Sharia4', localizado en Reino Unido, ha sido ilegalizado y declarado Organización Terrorista en todos y cada uno de los nombres que había adoptado, decisión confirmada por el Home Office (equivalente al Ministerio del Interior).

Además esta célula se estaba sobredimensionando e interesándose en el establecimiento de una vía de adquisición de armas y manuales de explosivos. Esta nueva variante en su dinámica operativa, habría incrementado la peligrosidad de la misma, convirtiéndose en una grave amenaza para la seguridad nacional.

Fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por Europa Press sospechan que esta célula estaba dispuesta a pasar de la captación y envío de terroristas a zonas de conflicto como Mali, Libia o Siria a crear una infraestructura estable en Melilla y Nador con los combatientes que van a ir retornando.

Estas mismas fuentes han precisado que el objetivo principal del grupo era atacar intereses de Marruecos más que en España. Los detenidos cuentan con numerosos contactos con grupos terroristas que operan en el Sahel y otras zonas en conflicto de Africa.

Los expertos en la lucha antiterrorista consideran que la fase de captación y envió de yihadistas al extranjero está llegando a su fin y prevén el retorno de una cantidad importante de personas con entrenamiento militar y experiencia para poder perpetrar atentados en sus lugares de origen.