«El Gobierno quiere extender su política bélica»

Varios cargos públicos de la formación radical abertzale Bildu estuvieron ayer presentes en la Gran Sala del Tribunal de Estrasburgo para apoyar las tesis de los abogados británicos contratados para la defensa de la etarra Inés del Río. Entre ellos estaban los diputados en el Congreso por Amaiur Rafael Larreina, Mikel Errekondo y Jon Iñarritu, así como el parlamentario vasco Oscar Matute y Mayorga Ramírez, diputado en la cámara navarra.

Mientras las asociaciones de víctimas pedían «justicia» para sus representados, los integrantes de Bildu, por su parte, lanzaron mensajes bien distintos y en una dirección completamente opuesta.

Aprovechando la presencia de quince medios de comunicación para cubrir la información –catorce españoles y la agencia francesa France Press– el diputado nacional y ex jugador de la selección española de balonmano, Mikel Errekondo, abogó porque el Tribunal Europeo de Derechos Humanos confirme la sentencia recurrida y rechace los argumentos planteados por el Gobierno de Mariano Rajoy, ya que «estamos hablando de los derechos de los presos reconocidos por la legislación penitenciaria española».

Errekondo aseguró, según su propia deducción, que precisamente esa legislación es la que «ha sido rechazada» tras haber sido considerada por una de las secciones del tribunal –concretamente la 3º, presidida por el magistrado andorrano Josep Casadevall, que no está presente en la vista del recurso– como una «medida de excepción».

Un mensaje mas duro todavía fue quizás el que lanzó el diputado navarro Óscar Matute, para quien, mas allá de la propia vista desarrollada ayer en la capital alsaciana y de los informes jurídicos presentados por España, lo que demuestra el Gobierno con este recurso es que el «interpreta la política y la justicia como una extensión de la política bélica». Matute añadió que el Ejecutivo «no ve más que una política monolítica cerrada».