El PNV exige gestos con el autogobierno en la negociación de los presupuestos

Ciudadanos avala que el Gobierno negocie las cuentas con los nacionalistas vascos

Ciudadanos avaló ayer la negociación del Gobierno con el PNV para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2017. El veto a que Mariano Rajoy negociase con este partido su investidura ha dado un giro, y ayer la formación naranja respaldó explícitamente esta decisión del Ejecutivo popular, justificándolo en el hecho de que el PSOE ya había anticipado su «no» a unas cuentas que todavía ni siquiera conocía. Será «a posteriori» cuando los de Albert Rivera vigilarán si en los posibles acuerdos hay cesiones que no puedan compartir, pero, de momento, ven bien que las dos partes se sienten a buscar puntos de acuerdo que permitan sacar adelante los Presupuestos del próximo año.

La negociación del Gobierno con el PNV se concretó ayer en la primera reunión oficial en el Congreso entre la vicepresidenta, ministra de Presidencia y para las Administraciones Territoriales, Soraya Sáenz de Santamaría, y el portavoz parlamentario del PNV, Aitor Esteban. Nada más tomar posesión, la vicepresidenta inició una ronda discreta de contactos con todos los portavoces parlamentarios para analizar las decisiones económicas inmediatas, techo de gasto y Presupuestos, y enfocar el arranque general de la legislatura. El PNV se sentó en la mesa reclamando un cambio de actitud por parte del Gobierno en todo lo referido al autogobierno, en concreto en relación a los conflictos en el Tribunal Constitucional entre la Administración central y la vasca en materia de competencias.

No entraron en cifras ni en medidas o demandas concretas, sino que fue un primer tanteo, que todavía no sirve para que el PNV confirme que no presentará una enmienda a la totalidad de las cuentas. Los nacionalistas vascos van a hacer valer caro el voto de sus cinco diputados. «Si no hay cambio de actitud sobre el autogobierno vasco no vamos a entrar a negociar», advirtió el portavoz nacionalista tras la reunión con la vicepresidenta. Según su versión, la reunión en el Congreso deja las cosas «exactamente igual» porque «sigue la leña». Ahora bien, más allá del discurso político, y de la escenificación del obligado pulso, el PNV está dispuesto a negociar, y espera cifras y documentos, que ayer todavía no se le hicieron llegar. En el caso de la investidura de Rajoy, no aceptaron ni siquiera sentarse a negociarla. Era un «no» inamovible. «Si el PP quiere negociar con el PNV los Presupuestos antes tiene que darse una premisa: que tiene que haber otro tipo de actitud. El diálogo no es solo que te llamen a una reunión», insistió Aitor Esteban. Las dos partes hicieron una revisión de la situación económica general, sin entrar todavía en las exigencias del PNV ni en el detalle de lo que el Gobierno está dispuesto a negociar con los nacionalistas.

Sáenz de Santamaría ya se ha entrevistado con el portavoz parlamentario de Podemos, Íñigo Errejón, y también con la representante de Coalición Canarias (CC), Ana Oramas. CC firmó un acuerdo con el PP ante la investidura de Rajoy, y apoyará previsiblemente también los Presupuestos de 2017. El Gobierno negocia, asimismo, el techo de gasto con el PSOE.

La vicepresidenta apuesta por la estrategia de la discreción, evitar el ruido mediático y las prisas. Ayer eludió hacer declaraciones, una posición que fue bien valorada desde el PNV. «Es positivo que no tenga prisa en llegar a acuerdos. Éste es un tema muy serio».