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El PP carga de nuevo contra Ciudadanos: «Su plan multiplicaría la subida fiscal»
El PP siguió ayer la senda abierta el viernes por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y colocó en el centro de su crítica política a Ciudadanos, al partido de Albert Rivera. Confirmando con esta estrategia que entiende que esta formación es uno de sus adversarios directos en las próximas citas electorales, esta vez fue el portavoz del Comité de Campaña para las autonómicas y municipales, Pablo Casado, el que apuntó contra este partido con el argumento de que el coste de su proyecto económico sería de 25.000 millones de euros. Es decir, que, según Casado, supondría multiplicar por tres la subida de impuestos de 2012. El viernes pasado la vicepresidenta también colocó en el centro de la diana el programa económico de Ciudadanos y a uno de sus autores, el economista Luis Garicano.
Ayer, el portavoz popular completó su crítica con la denuncia de la falta de experiencia de este partido en la gestión pública. «Presentar un programa de pilotaje está muy bien, pero los pasajeros de un avión lo primero que se preguntan es cuantas horas de vuelo tiene un piloto y, en este caso, sus horas de gobierno son cero, las mismas que las de Podemos», enfatizó en la sede de Génova. Insistiendo en esta estrategia, Casado personalizó su ataque en Rivera, al que reprochó que hubiera reclamado el rescate de España o que «Rajoy instaurase un Estado plurinacional». De Garicano recordó que defendió «un Estado multinacional, con más sensibilidad hacia Cataluña y el País Vasco».
El PP también dirigió ayer su precampaña electoral contra el candidato socialista por la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo. «Carga con un lastre muy pesado ya que ha sido ministro del Gobierno más perjudicial de la historia de la democracia», sentenció sobre él Casado. Al nuevo «cartel» socialista le echó en cara que dejase una tasa del 28% de fracaso escolar y del 25% en abandono escolar.
Y siguiendo con las críticas al PSOE, pasó a cuestionar el procedimiento de elección de Gabilondo por la falta de respeto al principio de democracia interna que ha puesto de manifiesto el líder del PSOE, Pedro Sánchez, con este golpe de efecto para remontar electoralmente en una «plaza» tan simbólica como Madrid. «Se les llena la boca de democracia interna y hacen un simulacro de votación exprés para intentar barnizar de democracia interna lo que ha sido un auténtico dedazo», argumentó.
De lo suyo, de los candidatos pendientes en el PP, no avanzó ni fechas ni alternativas. Casado defendió que Rajoy tiene «buen ojo» y presentará candidaturas ganadoras, avaladas por el balance de su gestión. En el PP confían en que Rajoy resuelva ya de manera inmediata la designación de las candidaturas que faltan, especialmente las de Madrid y Valencia, en cuanto termine el Debate del Estado de la Nación el próximo jueves. A principios de año el PP anunció que en febrero presentaría en un gran acto sus candidaturas para los comicios de mayo. Y entra ya en marzo sin haberlas ni siquiera cerrado. En el caso de Madrid, hoy son más los que se inclinan por la sorpresa que los que apuestan por la continuidad. Pero, en cualquier caso, son conjeturas sobre especulaciones porque Rajoy no ha hecho aún ningún gesto que lleve a pensar una cosa o su contraria.
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