Pactos electorales

El PP insiste en que Rajoy esperará un gesto de Sánchez para llamarle

El presidente niega a su dirección que vaya a proponer un reparto de cargos

Mariano Rajoy y Dolores de Cospedal antes del Comité de Dirección del PP
Mariano Rajoy y Dolores de Cospedal antes del Comité de Dirección del PPlarazon

El diálogo entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez sigue siendo uno de los argumentos que sirve para rellenar el debate político a la espera de que se conozca el resultado de la consulta a las bases de Podemos y que se confirme el escenario con el que trabajan todos los partidos, la convocatoria electoral. Por activa y por pasiva, y de manera preventiva, desde la dirección socialista están insistiendo en su «no» a dialogar con el presidente del Gobierno en funciones, y, por tanto, a sentarse a negociar un acuerdo de gobierno.

Es Ciudadanos el que reclama esa negociación a tres como una salida para justificar su pacto con el PSOE y, ya en clave electoral, para aligerar los riesgos de éste ante una cita en las urnas en la que el PP apelará al voto útil entre el electorado del centro-derecha para frenar a la izquierda.

La actitud de los socialistas lleva a que en la dirección popular sean muy escépticos no ya con la negociación de Mariano Rajoy con Pedro Sánchez, sino incluso con el sentido que puede tener que Rajoy intente un diálogo que nace muerto o que «haga cesiones al viento». «Hemos dicho por activa y por pasiva que nosotros no íbamos a engañar a los ciudadanos y que no entrábamos en el teatro», recordaban ayer en Génova. El líder popular negó ante su Comité de Dirección que haya planteado a los socialistas una reforma constitucional o un reparto de cargos. Y el mensaje que salió de esa reunión de estrategia fue el de ratificar que están dispuestos a hablar con el secretario general del PSOE o con quien éste designe, pero una vez que Sánchez abandone el «juego de trilero» y «deje claro que no está jugando a dos barajas». «Hay tiempo para pactar, lo que no es serio es que se nos traicione o instrumentalice».

El portavoz del PP, Pablo Casado, explicó que Rajoy aseguró ante la dirección del PP que no ha hecho ninguna oferta de cargos a los socialistas para cerrar un acuerdo de Gobierno, ninguna vicepresidencia o ministerio. Tampoco una reforma constitucional, sobre la que el PP mantiene su criterio: «Se puede perfeccionar, pero sin abrir en canal un modelo permeable, exitoso y con un consenso del que ahora carecería otro modelo».

Casado insistió en que queda tiempo para buscar un acuerdo que desbloquee la situación, pero que esa negociación tiene que ser sobre un folio en blanco y no sobre la base del acuerdo del PSOE con Ciudadanos para derogar las reformas de la pasada Legislatura o sobre el documento de condiciones de Podemos.